tag:blogger.com,1999:blog-149055392024-03-12T22:27:36.058-06:00LA JIRAFA AZULUN ESPACIO PARA VENTILAR MI IMPERTINENTE AMBICIÓN DE ESCRIBIR.HUGO VILLARROEL ABREGOhttp://www.blogger.com/profile/17961999961329849351noreply@blogger.comBlogger61125tag:blogger.com,1999:blog-14905539.post-37469640957092151522021-08-24T19:59:00.000-06:002021-08-24T19:59:54.737-06:00<p> </p><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">El proyecto C.R.A.S.H. es una invitación abierta al mundo para compadecer, respetar, amar y servir humildemente... En esta entrada hablaremos de la tercera letra del acrónico: Del Amor.</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial;"><br /></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial;"><br /></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg9rJmEyV2TD8tDPas3HlgVS0Vo7_9PCfcN0Qtynfv2TJt1ZhiwGaYJKm-V1_kBZjK4yF0dU4hK1zETgq8QXUXp1bLzqM2xQi1_5TQqX_AfJLU-FfZNsqSsbPl_wqa9_Mznkdobow/" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="800" data-original-width="1200" height="213" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg9rJmEyV2TD8tDPas3HlgVS0Vo7_9PCfcN0Qtynfv2TJt1ZhiwGaYJKm-V1_kBZjK4yF0dU4hK1zETgq8QXUXp1bLzqM2xQi1_5TQqX_AfJLU-FfZNsqSsbPl_wqa9_Mznkdobow/" width="320" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: justify;"><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><b>AMOR</b>.<o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><o:p> </o:p>El Amor es difícil de reducir a un concepto o
definición. En todo caso es una emoción que trasciende a sentimiento, una
vivencia que se incrusta en el alma, que redefine a todo aquel que pueda
experimentarla: remodela, transforma, purifica y santifica. Como abarca a toda
la actividad mental y espiritual, como repercute intensamente en el cuerpo
físico, es una experiencia vigorizante y total. Los fisiólogos la atribuyen a
descargas de sustancias neurotransmisoras en nuestro cerebro: dopamina,
endorfinas… ese reduccionismo naturalista podrá satisfacer a cínicos y
psicópatas, pero todo aquel que ama y cultiva el Amor sonríe, compasivo, abre
sus brazos e invita a compartir, no a teorizar o interpretar. No es solo
entrega y alegría, puede llevar a la separación y al dolor; el que ama se
siente vulnerable pero no le importa: se goza el Amor sin cálculos, sin esperar
retribución, entregándolo todo sin medida, pero con pleno respeto de las
necesidades, sentimientos y valores del ser amado, asumiendo los riesgos de la
incomprensión, el rechazo, quizás de la indiferencia. Saulo de Tarso,
convertido en San Pablo en virtud del amor, escribió un himno, que, a la fecha,
es quizás la más perfecta e inspirada composición sobre algo tan intangible y a
la vez tan real:</p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-SV">1 Corintios 13:</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;">“Aunque hablara las lenguas de los hombres y de los ángeles, si no
tengo amor, soy como campana que suena o címbalo que retiñe. Y aunque tuviera
el don de hablar en nombre de Dios y conociera todos los misterios y toda la
ciencia; y aunque mi fe fuese tan grande como para trasladar montañas, si no
tengo amor, nada soy. Y aunque repartiera todos mis bienes a los pobres y
entregara mi cuerpo a las llamas, si no tengo amor, de nada me sirve. El amor
es paciente y bondadoso; no tiene envidia, ni orgullo ni jactancia. No es
grosero, ni egoísta; no se irrita ni lleva cuentas del mal; no se alegra de la
injusticia, sino que encuentra su alegría en la verdad. Todo lo excusa, todo lo
cree, todo lo espera, todo lo aguanta. El amor no pasa nunca. Desaparecerá el
don de hablar en nombre de Dios, cesará el don de expresarse en un lenguaje
misterioso, y desaparecerá también el don del conocimiento profundo. Porque
ahora nuestro saber es imperfecto, como es imperfecta nuestra capacidad de
hablar en nombre de Dios; pero cuando venga lo perfecto desaparecerá lo
imperfecto. Cuando yo era niño, hablaba como niño, razonaba como niño; al
hacerme hombre, he dejado las cosas de niño. Ahora vemos por medio de un espejo
y oscuramente; entonces veremos cara a cara. Ahora conozco imperfectamente,
entonces conoceré como Dios mismo me conoce. Ahora subsisten estas tres cosas:
la fe, la esperanza, el amor, pero la más excelente de todas es el amor”.</p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-SV">Hay pasiones que simulan ser Amor… La pasión puede avasallar y tomar
la conciencia como rehén… Pero si hay que mentir, o si la dignidad se ve menoscabada
por una emoción, eso no puede ser Amor. El Amor en su forma pura se exhibe
libre, a la luz, enaltece y no denigra; la entereza del que ama, su devoción al
servicio de la verdad, la paz que inunda su existencia… Todo ello, entereza,
devoción, sinceridad, paz interior, todos son dones de Dios, un regalo
perfecto, encarnado en su Hijo, el Cristo, y en el Espíritu Santo, la Divina
Persona, el Amor en estado puro.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-SV">El Amor trasciende las fronteras de los estados del Yo, rebalsa al
niño interior, impregna todos los actos conscientes de la vida adulta y se
sublima en instintos de protección, altruismo y auténtico sacrificio, como los
de un padre protector y nutricio. Solo quien ama lo entiende porque no hay
manera de someter a escrutinio algo tan etéreo y del mismo modo palpable: se
materializa en la madre que acuna a su hijo, en la piel ardiente de los amantes
consagrados ante el Señor como una sola carne, en los niños que ríen juntos al
jugar, en el médico que se entrega, en el confesor que absuelve, en el maestro
abnegado e incansable, en la religiosa que entrega su vida entera al servicio… Se
siente, se vive, pero no puede disecarse ni estudiar al microscopio; se llega
al martirio por amor, ante las sonrisas irónicas de los incrédulos, de frente a
una Cruz Gloriosa en que los despojos del Cordero son el rescate por los vicios
y pecados de una Humanidad que dice amar pero que solo se entrega a las oscuras
maniobras de buscar placer a cualquier precio, en todo momento, sin compromiso,
pero también sin esperanza, sin consuelo, sin Fe… vacíos como un cascarón estéril,
irrelevantes como un suspiro en medio de la tempestad de su furioso egoísmo.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-SV">Amemos pues, con gozo, sin medida, pero con prudencia, respetando al
ser amado, dispuestos a servir con humildad, pues no es otra la intención de
quien ama: Deja de ser él mismo y se ofrece, superando al miedo, como
herramienta de Dios en su proyecto de Salvación. No hablemos más de amor,
vivámoslo como Pablo podría invitar a proceder: como la cosa más excelente que
podamos llegar a experimentar en nuestras existencias.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-SV"><br /></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES-SV">Hasta pronto, amigos amados...</span></p></div><br /><br /></span></div>HUGO VILLARROEL ABREGOhttp://www.blogger.com/profile/17961999961329849351noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-14905539.post-34888052184731894942021-08-13T13:03:00.001-06:002021-08-13T13:03:26.307-06:00<p> </p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial;"><b>Aquí posteo para ustedes la letra “R”del proyecto C.R.A.S.H… Me refiero a RESPETO. En los próximos posts hablaremos de Amor, Servicio y Humildad.</b></span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial;"><b><br /></b></span></p><p style="text-align: center;"><span style="font-family: arial;"><b>RESPETO.</b></span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">El respeto es un valor que se define, según la Real Academia de la Lengua Española, como “veneración, acatamiento que se hace a alguien, miramiento, consideración, deferencia”. En su forma plena, el respeto se demuestra con el ejercicio de la tolerancia, a su vez definida como “un valor moral que implica el respeto íntegro hacia el otro, hacia sus ideas, prácticas o creencias, independientemente de que choquen o sean diferentes de las nuestras”. Siendo cada uno de nosotros un ente altamente complejo, con pensamientos, emociones y actitudes irrepetibles, resulta improbable encontrar una coincidencia absoluta en cuanto a pareceres, visión de mundo y jerarquías de valores. Nos hermanan el código genético y la condición de hermanos en el mundo espiritual, todos hijos de un mismo Padre. Ahí terminan las semejanzas y comienza el abismo de las diferencias… por ello resulta prioritario, más aún, urgente, el aprender a convivir, gustosos y con buen espíritu, cada uno entre millones de extraños entre los que se contarán nuestros futuros amigos o enemigos, la pareja de una vida o aquel amor que nunca se podrá concretar.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial;"></span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><span style="font-family: arial;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjrpsvYPxl_hijfkeKqdkJ9SyCxX0WoIIHSE-C24q2BnAGddgVg8HLPUc-vTVorJRw22l78ZaMttmBV8MfrVpt6p3aqjbnZLNNsORaKjvz5URCabhPtptrYKPkgjRnvykDe_KMG3A/" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="401" data-original-width="520" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjrpsvYPxl_hijfkeKqdkJ9SyCxX0WoIIHSE-C24q2BnAGddgVg8HLPUc-vTVorJRw22l78ZaMttmBV8MfrVpt6p3aqjbnZLNNsORaKjvz5URCabhPtptrYKPkgjRnvykDe_KMG3A/" width="311" /></a></span></div><p></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">En todo caso, hay límites que no deben cruzarse, fronteras sagradas que hasta Nuestro Señor no quiso traspasar: el libre albedrío de cada uno dicta las directrices de la vida personal, aún errando, tropezando, trastornando el equilibrio natural, causando, incluso, daño al prójimo o a uno mismo. Esta libertad muchos la ejercen sin respeto, aunque demandan se les respete la suya propia, a menudo sin conciencia de esa falta de simetría… Precisamente se ha dicho (Benito Juárez) que “el respeto al derecho ajeno es la paz”, por lo que cualquier intento de pacificar a la sociedad comienza por estar en paz consigo mismo, en no irrespetar el propio cuerpo ni violentar al propio espíritu; escrutar el mundo interior con intenso examen de conciencia para luego, con toda la humildad de que podamos hacer acopio, armarse de compasión, seguir el ejemplo de Jesús y laborar por la paz con el prójimo y el resto de la humanidad, así como con nuestro mundo y todas sus criaturas. De ahí la relevancia del respeto, como valor, como generador de paz, en libertad.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial;"><br /></span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">¿Significa esto que deberemos, con cobardía y pasividad, claudicar ante los atropellos ajenos, ante las faltas de respeto? Poner la otra mejilla no es cobardía, es el manifiesto de una intención de no dañar, una propuesta de tregua… El diálogo, la delimitación de las líneas que no deben ser cruzadas, buscar el concurso de la ley y apoyarse en la fortaleza que viene de la Fe pueden ser los signos de un ser que vive signado por la devoción al respeto, consagrado a hacer de su entorno un lugar mejor y más apacible y, muy importante, alguien dispuesto a comprender y perdonar... Sí, el respeto lleva también al Perdón, porque estamos dolorosamente conscientes de que todos y cada uno de nosotros podemos fallar, lastimar… Y que también podríamos ser merecedores de ser perdonados, en virtud de ese mismo respeto que todos necesitamos, a menudo desesperadamente, como seres humanos.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial;"><br /></span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">Vivamos, pues, humildemente pero con intensidad, amando sin límite, pero respetando, poniendo a este valor como elemento fundamental que dirija y condicione toda interacción con la Naturaleza, con sus criaturas, con el prójimo y, en especial… Con uno mismo. En todo caso, tenemos la Misericordia de Dios, que nos alienta a perdonar las faltas de respeto, para poder sanar las almas, para aspirar a ese Paraíso que se nos ha prometido pero que debemos construir también, cada día, en nuestra Tierra.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial;"><br /></span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">Hasta pronto, amigos.</span></p>HUGO VILLARROEL ABREGOhttp://www.blogger.com/profile/17961999961329849351noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-14905539.post-51687551567496424892021-08-10T13:33:00.004-06:002021-08-10T13:33:33.414-06:00<p> </p><p align="center" class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: center;"><b><span style="color: #c00000; font-size: 12.0pt; mso-ansi-language: ES-MX;">EDITORIAL: EXPECTATIVAS Y ESPERANZAS EN TIEMPO DE COVID-19.</span></b><b><o:p> </o:p></b></p><p align="center" class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: center;"><b><o:p></o:p></b></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><b><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhVas0tWGmR_fZL-IoPOr4I4T9AyjYIK8UywA13TqbxfxWpKFwfvnmvrNsf0oAWizwyPOPViQPZdAAeBckEU6IHDnyHd7gilA9GNDv2PmR0de9B1xsZQisJhgqBVmA0GjVYVflWgQ/" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="1024" data-original-width="1024" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhVas0tWGmR_fZL-IoPOr4I4T9AyjYIK8UywA13TqbxfxWpKFwfvnmvrNsf0oAWizwyPOPViQPZdAAeBckEU6IHDnyHd7gilA9GNDv2PmR0de9B1xsZQisJhgqBVmA0GjVYVflWgQ/" width="240" /></a></b></div><p></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="color: black; mso-ansi-language: ES-MX; mso-themecolor: text1;">Cerca
del fin del año 2 de pandemia, la emergencia de variantes agresivas y altamente
infecciosas del SARS-CoV-2 sigue fomentando altas tasas de contagios, en
especial en población juvenil aún no inmunizada. La desesperante lentitud de
las campañas de vacunación -a ratos pareciese que se requiere de sobornos para
motivar a los renuentes- no ha permitido que la ansiada inmunidad de rebaño sea
posible, excepto en ciertas locaciones específicas de alto rendimiento, como
Israel, Emiratos Árabes Unidos, Chile y Uruguay. Aún a pesar de que estos
países han superado hace algunas semanas las tasas de 70% de cobertura en
adultos, las variantes como delta y lambda han causado repuntes alarmantes,
que, en apariencia y al menos para estos países, están comenzando a ceder. En el
presente boletín daremos preferencia a noticias cortas de interés, debidamente
documentadas, en la mejor tradición del periodismo médico. Damos, además,
acceso a las fuentes originales, para quienes deseen profundizar y navegar en
otras dimensiones anexas a la noticia principal.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="color: black; mso-ansi-language: ES-MX; mso-themecolor: text1;">La
ruta es larga, pero no hay motivos para desmayar. Estamos a las puertas de
tomar decisiones que otros, con mucho valor, ya están afrontando: aplicar las
primeras dosis de refuerzo. Esto, claro, dependerá, con mucho, de las vacunas
empleadas en principio, en especial vacunas como CoronaVac y, con casi total
seguridad, de AstraZeneca. Estos refuerzos resultan controversiales cuando ni
siquiera se ha alcanzado una cobertura mínima deseable en muchas locaciones,
pero deberían ser prioritarios, en opinión de este editor, en sujetos de muy
alto riesgo que tienen inmunizaciones de inferior eficacia en cuanto al
mantenimiento de niveles de anticuerpos protectores. La emergencia de nuevas
vacunas y de vías novedosas de administración aumenta la esperanza en un mundo
libre de pandemia. Todo está, para bien o para mal, en nuestras manos.<o:p></o:p></span></p>HUGO VILLARROEL ABREGOhttp://www.blogger.com/profile/17961999961329849351noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-14905539.post-9290165297672514252021-07-19T18:03:00.002-06:002021-08-13T13:05:18.464-06:00<h1 style="text-align: center;"><span style="font-family: arial; font-size: large;"> </span></h1><h1 style="text-align: center;"><span style="font-family: arial; font-size: large;">Proyecto C.R.A.S.H.</span></h1><div><span style="font-family: arial; font-size: large;">Comenzamos con la letra "C", de "compasión".</span></div><h1 style="text-align: center;"><span style="font-family: arial; font-size: large;"><br /></span></h1><h1 style="text-align: center;"><span style="font-family: arial; font-size: large;">Empatía, Simpatía... y COMPASIÓN.</span></h1><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgXuXNKYkl6ZcUdevfK3t4gCwiaS9Q_J-Y5czF0rGqZyzH7yocFZcE1kDHyHwuCJbdqpHGCWg0q1k5LElZJSM7qdKAXtRahwgGSDANLBCER42ICX8T5EzYIPmGzUOcn1UJeZDotXA/" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="1000" data-original-width="1280" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgXuXNKYkl6ZcUdevfK3t4gCwiaS9Q_J-Y5czF0rGqZyzH7yocFZcE1kDHyHwuCJbdqpHGCWg0q1k5LElZJSM7qdKAXtRahwgGSDANLBCER42ICX8T5EzYIPmGzUOcn1UJeZDotXA/" width="307" /></a></div><br /><p></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">La compasión se define, según la Real Academia de la Lengua Española, como un “sentimiento de pena, de ternura y de identificación ante los males de alguien”. Consiste en compartir las pasiones de los demás, en hacer propio el dolor ajeno. Como explicaré, va mucho más allá de la simpatía o la empatía y, aunque suele confundirse con lástima, la postura existencial de las personas involucradas en una relación compasiva es simétrica: Ni el que socorre se enaltece ni el socorrido se degrada; no hay actitudes paternalistas o de superioridad. La compasión es una forma de comunión, la base del amor fraterno, el amor de cada persona al resto de la Humanidad. Cuando la compasión llama a la acción se habla de misericordia: el corazón (cordis) se inclina, solícito, al cuidado de aquel que está en desgracia o necesidad (misere); se busca ser benevolente, solidario, llevar consuelo y servir sin cálculo ni esperando retribución.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">Cuando alguien sufre, sin importar la causa, lo puede expresar con aislamiento, arrebatos de rabia o tristeza, pero el dolor emocional puede llevar a algunos a la agonía y, a otros, a veces y de modo paradójico, a la parálisis y anestesia emocionales. La desventura tiene también repercusiones en la esfera intelectual: pérdida de la serenidad, ansiedad, desconfianza, estados de confusión y dificultades para la concentración y el pensamiento creativo… Puede hasta perderse la Fe misma. Para el alma sensible, ser testigo de estas emociones no puede resultar indiferente. El Yo Padre, paternalista y protector, se aproxima, solícito, a brindar soporte y refugio; el Yo Adulto emprende de inmediato un análisis integral y objetivo de la crisis para encontrar soluciones… El Yo Niño abraza y llora con quien sufre, se siente desgarrado y se entrega, llena de amor, para consolar. Es sabido que ante emociones fingidas o parásitas los sentimientos no son contagiosos ni se siente el alma invitada a la compasión: el desdén ante el fraude emocional nos impide la conexión esencial para esta experiencia porque solo lo auténtico llega al corazón. Hay personas que parecen genéticamente incapacitadas para la empatía o la compasión: la ciencia médica los llama “psicópatas”… Pero este no es el tema de la presente reflexión, sin dejar de aclarar que si alguien es merecedor de toda la compasión del mundo es precisamente este ser incapaz de sentir, de vibrar en armonía y sincronía con las emociones de sus hermanos de especie.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">Veo en la compasión la base de toda forma de vida que contemple paz, serenidad y gozo sobre la Tierra. Sin compasión no puede haber acción solidaria, mucho menos auténtica caridad. No la confundamos con la filantropía y la beneficencia que derraman riquezas a través de donativos… Aplaudimos estas iniciativas pero, sin compartir el afecto y el dolor, sin sufrir con los que sufren, no hay verdadera compasión. Este sentimiento es crucial porque causa calma y bienestar en los demás, pero también lo hace en el sujeto compasivo: actor y receptor del sentimiento y de las transacciones implicadas se benefician por igual. Quien compadece se emociona, pero también, como un primer paso, analiza, comprende y extrae conclusiones (el proceso de desarrollar “empatía”) que refuerzan la necesidad de dar curso natural al primer atisbo de emoción, la que solemos llamar “simpatía”. Luego, con la emoción del prójimo también vivida en carne propia, se generan conductas o intervenciones protectoras y genuinamente salvadoras: no se trata de recitar palabras de uso corriente, ni de frases hechas para la ocasión, lo que se suele hacer para conveniencia social a modo de ritual, en momentos infaustos. Quien compadece sufre, pero a la vez siente gozo; descuida sus quehaceres y negocios pero, lejos de perder, se enriquece; la compasión da analgesia y descanso al doliente, pero salva al compasivo de su propia pena, lo enaltece y le acerca a lo celestial, a lo divino, a ser imitación de Cristo en la Tierra.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">Muchos se sienten más cómodos en las descritas esferas de la simpatía o la empatía, las hermanas menores de la compasión. La empatía es, como vimos, una respuesta de la mente y del intelecto, sin componente emocional; la simpatía ya muestra cierta participación emocional… pero no hay aún compromiso de acción para paliar la desventura del prójimo atribulado. La compasión va al extremo: procede de lo más profundo del alma y compromete a todo el ser que, convocando armónicamente a cada uno de sus estados del Yo, procede amorosamente en consonancia con la pena ajena, llevando alivio pero, no menos importante, sembrando también esperanza y conformidad. Ante lo inevitable, ante lo que no podemos cambiar, siempre nos queda reservada la capacidad de afrontar las pérdidas, liberarse de angustia cediendo la carga en el yugo de Cristo, depositario de la entera tribulación de todo el Universo… Este proceso de abandono a menudo requiere, para bien del atribulado, de la participación de un entorno de personas compasivas, alentadoras y deseosas de nutrir y servir de modo constante y fiel.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">Sea pues, para todos, hecha la invitación de compadecerse plena y profundamente del prójimo, pero, por qué no, también de nuestras propias tristezas y debilidades, que merecen tanta atención como las ajenas… Conocerse uno mismo a profundidad y dolerse de las vivencias traumáticas del pasado no debe constituirse en un ejercicio morboso de victimización y avivamiento de rencores, todo lo contrario: es una gimnasia espiritual que fortalece una convicción central, el que como hermanos en Cristo (y aún como hermanos de aquellos que no son creyentes) todos somos dignos de compasión, misericordia y perdón. Así, la compasión desemboca en la humildad porque nos entrena en el desapego: “si te piden la túnica, entrega también el manto”.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">La compasión se extiende, sin poder ni deber evitarse, no solo hacia las víctimas… Deberíamos ser capaces de compadecer también, cuando corresponda, a victimarios y verdugos. Algunas personas se han vuelto duchas en el arte de martirizar y torturar, explotar y denigrar. Ante tanta miseria espiritual ¿deberemos esgrimir nuestra furia y odio? “Mía es la venganza” ha dicho el Señor. Para nosotros, imperfectos para juzgar, toda retribución terrenal se basa en la Justicia. Se dirá, con razón, que la Justicia del hombre es parcial, mezquina y utilitaria, que los ocultos mecanismos de la corrupción pervierten a un sistema que beneficia a los poderosos y se ensaña con los débiles y marginados… Pero sin importar las falencias y aciertos de las Leyes, estamos llamados a compadecer tanto a héroes como a villanos. La mayor muestra de compasión de una víctima ante su verdugo se refleja en la frase del Cordero Degollado: “Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen”… Para nosotros, tan inferiores al Salvador, queda el poder de la oración sincera, pidiendo por la conversión y la salvación de los enemigos del Bien, de la Verdad y la Justicia.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">No puede haber salvación sin compasión. No se puede hablar de amor sin compartir pasiones, sin auténtica intimidad; el que sirve y atiende sin sentir compasión es un asalariado que buscará siempre pastos más verdes ofreciéndose al mejor postor… ¿Cómo ser humildes sin la compasión? La pretensión de fundar un paraíso en la Tierra se basa en la compasión. Les invito, con amor de hermano, a plegarnos todos a esta gracia de ser compasivos, para la construcción de este Edén del que nosotros mismos nos hemos arrojado, por culpa de nuestra soberbia e indiferencia. Amén.</span></p>HUGO VILLARROEL ABREGOhttp://www.blogger.com/profile/17961999961329849351noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-14905539.post-30746058462748671912021-07-17T12:22:00.003-06:002021-07-17T12:22:33.593-06:00<p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><b><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Calibri",sans-serif; font-size: 18.0pt; mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-bidi-theme-font: minor-latin; mso-hansi-theme-font: minor-latin;">LA SOCIEDAD DIVERTIDA</span></b><b><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Calibri",sans-serif; font-size: 18.0pt; mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-bidi-theme-font: minor-latin; mso-hansi-theme-font: minor-latin;"> </span></b></p>
<p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><b><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Calibri",sans-serif; font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-bidi-theme-font: minor-latin; mso-hansi-theme-font: minor-latin;">LA MODA COMO EJE DE LA CONDUCTA<o:p></o:p></span></b></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><b><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Calibri",sans-serif; font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-bidi-theme-font: minor-latin; mso-hansi-theme-font: minor-latin;"><br /></span></b></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 18.6667px;"><span style="font-family: Calibri, sans-serif;"><b>Presento a ustedes un material redactado hace algunos años por mi gran amigo, el Dr. José Ricardo Suárez Arana, eminente cardiólogo y humanista salvadoreño.</b></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Calibri",sans-serif; mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-bidi-theme-font: minor-latin; mso-hansi-theme-font: minor-latin;"> </span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Calibri",sans-serif; mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-bidi-theme-font: minor-latin; mso-hansi-theme-font: minor-latin;">En los ambientes <i>light</i>
hay una expresión que se repite como si fuera una máxima: “Fulanito es muy
divertido”, con lo que se da a entender que uno de los atractivos de esa
persona es su capacidad de asombrar a los demás y hacer que la pasen bien. La
gente, las reuniones, las cenas o los libros son calificados como<b> </b><i>“divertidos”</i>, como si
esto fuera lo mejor que se puede decir de ellos. También las modas en el
lenguaje coloquial traducen lo que está sucediendo, porque constituyen el eje alrededor del cual gira la sociedad
posmoderna. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Calibri",sans-serif; mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-bidi-theme-font: minor-latin; mso-hansi-theme-font: minor-latin;"> </span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Calibri",sans-serif; mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-bidi-theme-font: minor-latin; mso-hansi-theme-font: minor-latin;">No importa que los códigos que hoy rigen tengan consistencia o sean
banales; da igual. Lo decisivo es que un comportamiento determinado se lleve… <b><u>el hombre light es un producto que
abunda especialmente en los niveles socioeconómicos altos de Occidente. También
puede aflorar en los estratos medio y medio-bajos, como influjo resonante de
las capas superiores. En tal sentido, las revistas del corazón (revistas
españolas de “chambres” sociales) hacen de correa de transmisión: se imita la
forma de vestir de los personajes que en ellas aparecen, sus expresiones y, lo
que es más grave, su tipo de vida, tantas veces vacío y roto, deshilachado (su
vida disipada, en resumen).</u></b><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Calibri",sans-serif; mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-bidi-theme-font: minor-latin; mso-hansi-theme-font: minor-latin;"> </span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Calibri",sans-serif; mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-bidi-theme-font: minor-latin; mso-hansi-theme-font: minor-latin;">Al tener el hombre de la sociedad de bienestar todas las apetencias
materiales cubiertas, además de una serie de libertades claramente dibujadas,
puede suceder que si no abre otras vías más ricas en el campo cultural o
espiritual se deslizará por una rampa que termina en la frivolidad. <b><u>En el hombre esencialmente frívolo no
hay debate ideológico ni inquietudes culturales.</u></b> ¿Cuales son sus
principales motivaciones? Todas aquellas
correspondientes al <b>hedonismo
materialista permisivo</b>, característico de lo que Gilles Lipovetski denomina
en su libro <b>El Imperio de lo efímero</b> “el siglo de la seducción y lo efímero”. Una
sociedad dominada por la frivolidad, <b>centrada
en el consumo</b>, aturdida por la publicidad, infantilizada e influenciada por
los “personajillos” que están en el candelero no es capaz de establecer
sistemas, teorías o esquemas posibles para la vida pública.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><b><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Calibri",sans-serif; mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-bidi-theme-font: minor-latin; mso-hansi-theme-font: minor-latin;"> </span></b></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><b><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Calibri",sans-serif; mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-bidi-theme-font: minor-latin; mso-hansi-theme-font: minor-latin;">En el hombre “light” hay una ausencia casi absoluta
de cultura.</span></b><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Calibri",sans-serif; mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-bidi-theme-font: minor-latin; mso-hansi-theme-font: minor-latin;"> Dentro del terreno intelectual, solo
busca aquello que tiene relación con su vida profesional. Su nivel de lectura
(ensayos o novelas actuales) es prácticamente mínimo, y no digamos si se trata
de obras clásicas. Aquello <b>que no es
trabajo profesional resulta leve, ligero, evanescente.<u> La regla de oro es la
superficialidad, </u></b>de tal forma que en una cena, por ejemplo, si aparece
un tema serio, es muy frecuente que en seguida alguien lo trivialice poniendo un
disolvente irónico que despista a los contertulios y los lleva nuevamente a ese
<b>no hablar de nada.</b> De hecho, se
repiten continuamente las mismas frases, comentarios o tópicos del lenguaje (se
recomienda leer <b>Yuppies, jet set, la
movida y otras especies,</b> Ed. Temas de Hoy, Madrid, 1988, su autora, Carmen
de Posadas).<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Calibri",sans-serif; mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-bidi-theme-font: minor-latin; mso-hansi-theme-font: minor-latin;"> </span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><b><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Calibri",sans-serif; mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-bidi-theme-font: minor-latin; mso-hansi-theme-font: minor-latin;">LA ENFERMEDAD DE LA ABUNDANCIA<o:p></o:p></span></b></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Calibri",sans-serif; mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-bidi-theme-font: minor-latin; mso-hansi-theme-font: minor-latin;">Pero, ¿de que se habla cuando digo que no se habla de nada? Pues de la
vida ajena, de las rupturas de parejas famosas, de algún negocio importante que
haya dado a cualquiera de los asistentes una buena cantidad de dinero…En
conclusión, pobreza total de contenidos. El problema fundamental es que el hombre <i>“light”</i> no tiene fondo y
por eso es muy difícil que sea capaz de mantener una conversación de cierta
altura. Temas relacionados con la literatura o la cultura son muy raros, pero
si por alguna razón persisten, es frecuente observar que el hombre <i>“light”</i> toma
sorprendentemente parte activa en ese diálogo. La interpretación de este hecho
yo la formularía así: si tengo bastante poder, en mi negocio gano mucho dinero y
he triunfado de algún modo, ¿cómo no voy a saber yo opinar de esto, de aquello
o de lo de más allá? <b>Ser rico o ganar
mucho dinero son las mejores cartas de presentación en un ambiente “<i>light</i>”.</b>
Aunque se niegue, este es el hilo conductor que hilvana todas las relaciones.
En más de una ocasión he oído comentar como el máximo elogio hacia alguien, <b>“que tiene cinco guardaespaldas”.</b> <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Calibri",sans-serif; mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-bidi-theme-font: minor-latin; mso-hansi-theme-font: minor-latin;"> </span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Calibri",sans-serif; mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-bidi-theme-font: minor-latin; mso-hansi-theme-font: minor-latin;">Los temas de los que habla el hombre
“<i>light</i>”<b> </b>podrían quedar
enumerados así: la vida ajena, los viajes y las anécdotas de los mismos, la
cena de esta o aquella persona (en la que lo importante era sobre todo estar) o la última separación conyugal
(sobre la que cada uno manifiesta sus preferencias y críticas). Cuando se
aborda el drama epidémico de estas rupturas, es posible que la conversación
adopte un tono más interesante, pues el asunto es verdaderamente serio. En este
caso uno puede encontrarse con la agradable sorpresa de lograr una auténtica
tertulia, con todos sus ingredientes: diálogo abierto, provechosos, con
réplicas atinadas y participación activa. No obstante, si el espíritu <i>light</i> es excesivo, todo se mueve
por la pendiente de los tópicos, <b>el</b> <b>hedonismo</b> <b>y</b> <b>la</b> <b>permisividad</b>.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Calibri",sans-serif; mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-bidi-theme-font: minor-latin; mso-hansi-theme-font: minor-latin;"> </span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Calibri",sans-serif; mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-bidi-theme-font: minor-latin; mso-hansi-theme-font: minor-latin;">El marido de una paciente me decía en la consulta: “Doctor, usted irá
a cenas interesantísimas en las que se hablará de todo y saldrá enriquecido”.
“No”, le respondí. Muchas veces me he acordado de esta observación,
especialmente cuando el grado de frivolidad alcanza sus cotas máximas. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Calibri",sans-serif; mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-bidi-theme-font: minor-latin; mso-hansi-theme-font: minor-latin;"> </span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Calibri",sans-serif; mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-bidi-theme-font: minor-latin; mso-hansi-theme-font: minor-latin;">En este final de siglo (este libro se escribió en 1992), <b><u> la enfermedad de Occidente es la de la
abundancia: tener todo lo material y haber reducido al mínimo lo espiritual.</u></b>
No importan ya los héroes, los personajes que se proponen como modelo carecen
de ideales: son vidas conocidas por su nivel económico y social, pero rotas,
sin atractivo, incapaces de echar a volar y superarse a si mismas. <b><u>Gente repleta de todo, llena de cosas,
pero sin brújula, que recorren su existencia consumiendo, entretenidos en
cualquier asuntillo y pasándola bien, sin más pretensiones.<o:p></o:p></u></b></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><b><u><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Calibri",sans-serif; mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-bidi-theme-font: minor-latin; mso-hansi-theme-font: minor-latin;"> </span></u></b></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Calibri",sans-serif; mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-bidi-theme-font: minor-latin; mso-hansi-theme-font: minor-latin;">Tomado del libro “<b>El hombre
light, una vida sin valores”</b> del eminente siquiatra y humanista español Dr.
Enrique Rojas. Su análisis es el de
España, un país del primer mundo, con muchas virtudes en el campo de la
cultura, pero experimentando un cambio preocupante en la juventud; cambios en
la visión de la vida de los jóvenes, que ponderan la conducta sin valores de la
nueva sociedad y menosprecia sus grandes figuras como Cervantes, Machado, Ramón
y Cajal, Fuster, Severo Ochoa y otros grandes personajes de la intelectualidad
hispana. Mucho mas preocupante aún, es la situación en nuestro tercero (¿o
cuarto?) mundo, en el que un buen porcentaje de nuestra población vive en la
miseria y queriendo ostentar “formas de vida” que se están presentando en las
sociedades de la abundancia (primer mundo), sin haber alcanzado ni siquiera un
mínimo de desarrollo económico, social y cultural. Estas son paradojas que ya
las podemos observar en nuestro país.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p>
<p><b style="text-align: right;"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: "Calibri",sans-serif; mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-bidi-theme-font: minor-latin; mso-hansi-theme-font: minor-latin;">Ricardo Suárez Arana.</span></b> </p>HUGO VILLARROEL ABREGOhttp://www.blogger.com/profile/17961999961329849351noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-14905539.post-85839138718755755722021-06-08T07:35:00.002-06:002021-06-08T07:35:34.131-06:00<p> </p><p align="center" class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm; text-align: center;"><b><span lang="ES-MX" style="font-size: 14.0pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES-MX;">CANTANDO
EN TIERRA EXTRAÑA: </span></b></p><p align="center" class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm; text-align: center;"><b><span lang="ES-MX" style="font-size: 14.0pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES-MX;">Dedicado a mi patria, El Salvador.<o:p></o:p></span></b></p>
<p align="center" class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm; text-align: center;"><b><span lang="ES-MX" style="font-size: 14.0pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES-MX;"><o:p> </o:p></span></b></p>
<p align="center" class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm; text-align: center;"><span lang="ES-MX" style="font-size: 14.0pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES-MX;">Me
duele esta tierra <o:p></o:p></span></p>
<p align="center" class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm; text-align: center;"><span lang="ES-MX" style="font-size: 14.0pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES-MX;">Desalmada<o:p></o:p></span></p>
<p align="center" class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm; text-align: center;"><span lang="ES-MX" style="font-size: 14.0pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES-MX;">Cautiva
y pendenciera<o:p></o:p></span></p>
<p align="center" class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm; text-align: center;"><span lang="ES-MX" style="font-size: 14.0pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES-MX;">duelen
sus aristas afiladas<o:p></o:p></span></p>
<p align="center" class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm; text-align: center;"><span lang="ES-MX" style="font-size: 14.0pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES-MX;">Su
sabor a tierra<o:p></o:p></span></p>
<p align="center" class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm; text-align: center;"><span lang="ES-MX" style="font-size: 14.0pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES-MX;">Su
olor a sangre <o:p></o:p></span></p>
<p align="center" class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm; text-align: center;"><span lang="ES-MX" style="font-size: 14.0pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES-MX;">Sangre
de mil venas cercenadas.<o:p></o:p></span></p>
<p align="center" class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm; text-align: center;"><span lang="ES-MX" style="font-size: 14.0pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES-MX;"><o:p> </o:p></span></p>
<p align="center" class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm; text-align: center;"><span lang="ES-MX" style="font-size: 14.0pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES-MX;">Esta
pena no sabe de palabras<o:p></o:p></span></p>
<p align="center" class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm; text-align: center;"><span lang="ES-MX" style="font-size: 14.0pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES-MX;">Deja
surcos de pólvora y sal<o:p></o:p></span></p>
<p align="center" class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm; text-align: center;"><span lang="ES-MX" style="font-size: 14.0pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES-MX;">en
las mejillas agrietadas…<o:p></o:p></span></p>
<p align="center" class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm; text-align: center;"><span lang="ES-MX" style="font-size: 14.0pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES-MX;">Te
canto en tierra extraña<o:p></o:p></span></p>
<p align="center" class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm; text-align: center;"><span lang="ES-MX" style="font-size: 14.0pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES-MX;">Soñándome
profeta<o:p></o:p></span></p>
<p align="center" class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm; text-align: center;"><span lang="ES-MX" style="font-size: 14.0pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES-MX;">El
silencio y el olvido<o:p></o:p></span></p>
<p align="center" class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm; text-align: center;"><span lang="ES-MX" style="font-size: 14.0pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES-MX;">Mis
únicos testigos…<o:p></o:p></span></p>HUGO VILLARROEL ABREGOhttp://www.blogger.com/profile/17961999961329849351noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-14905539.post-67394075624758552322021-05-11T15:51:00.000-06:002021-05-11T15:51:35.722-06:00<h1 style="text-align: center;"><span style="font-family: arial;"> Un poema.</span></h1><div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj6dzCoC_z0hj3SMIkn3-OetRwav6Q7fM4gPw4syh2ZpB8Pl91d3CeDKsicbtEK54YvAd3s9VgRjl1kdbeIhpgte3ZBh0-iLLBYXIdNgp-STdgx5Zdvub8GKKB0z7yo4AJIYGIJrA/s2048/IMG_E3642.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="2048" data-original-width="1536" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj6dzCoC_z0hj3SMIkn3-OetRwav6Q7fM4gPw4syh2ZpB8Pl91d3CeDKsicbtEK54YvAd3s9VgRjl1kdbeIhpgte3ZBh0-iLLBYXIdNgp-STdgx5Zdvub8GKKB0z7yo4AJIYGIJrA/s320/IMG_E3642.JPG" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><p style="clear: both; text-align: justify;">Tengo un proyecto poético al que dedico menos del tiempo merecido... pero es una compilación poética: "Boleros Chinos". Como una muestra de este trabajo les transcribo un breve poema:</p><p style="clear: both; text-align: justify;"><br /></p><p style="clear: both; text-align: center;"><b>VII</b></p><p style="clear: both; text-align: center;"><span style="font-size: 14pt;">Muéstrame tus manos</span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">Sí, déjame palpar tu piel, tus
dedos</span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">Quiero entender tus cicatrices<o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">Comerme tus dolores<o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">Hacerlos míos.</span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">Entrégame esos recuerdos que te
desvelan</span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">Los convertiré en sonrisas<o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">Haré fiesta con tus cabellos, con
tu carne temblorosa<o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">Te inventaré de nuevo<o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">Espantaré brujas y demonios<o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">Pelearé tus batallas mientras
descansas a la sombra de este amor<o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">Este amor que me define y me mata
despacio y con placer<o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">Este amor de llamaradas y cenizas<o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">De vendaval y tormenta<o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">De caricias en penumbra, de besos
imposibles…<o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;"> </span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;"> Aférrate fuerte, amor<o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">Amárrate a este corazón</span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">Sé que
duele, lo sé<o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">Pero aquí estoy yo, hecho de luz,
llama eterna<o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">Para calentar tus huesos,
iluminar tu universo<o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">Y no te pido nada<o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">Porque me lo has dado todo<o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">Navego a ciegas sobre ti, dentro
de ti, desnudo<o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">Ajeno a este mundo ajeno e inútil<o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">Eres mi nueva geografía<o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">Me llevas a parajes sin nombre
aún<o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">Y me conduces a esta tierra vacía
y perfecta<o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;"> Que comienza justo en la frontera de tu piel<o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">Y se acaba justo ahí, donde tu
aliento se evapora.<o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">Quédate<o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">Y sanemos juntos<o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">Para un día también juntos morir<o:p></o:p></span></p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">Pero sin miedo, de cara al sol<o:p></o:p></span></p><p style="clear: both; text-align: justify;">
</p><p align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><span lang="ES" style="font-size: 14.0pt; mso-ansi-language: ES;">Con una sonrisa.<o:p></o:p></span></p><br /><span style="font-family: arial;">Gracias, amigos, por su atención a esta publicación. </span></div><div><span style="font-family: arial;">Hasta pronto</span></div>HUGO VILLARROEL ABREGOhttp://www.blogger.com/profile/17961999961329849351noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-14905539.post-23746984186243450372021-04-24T19:15:00.001-06:002021-04-24T19:15:28.592-06:00<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhNEOFZFDj0no4TAgMd9S7ZD3WE35nZen48w_i3Ajt5nvNr5pZFUFoZZ_j1Idrc6XgPxl3nzMoNj12Gtda1__LJFsS_pEghood9VyUUmyZy0e3rkfmo3nUjUqBzyKPnt6lUaioP5A/s1142/HVA+2020.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1142" data-original-width="1103" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhNEOFZFDj0no4TAgMd9S7ZD3WE35nZen48w_i3Ajt5nvNr5pZFUFoZZ_j1Idrc6XgPxl3nzMoNj12Gtda1__LJFsS_pEghood9VyUUmyZy0e3rkfmo3nUjUqBzyKPnt6lUaioP5A/s320/HVA+2020.JPG" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: center;"><span style="color: black; mso-ansi-language: ES-MX; mso-themecolor: text1;"><span style="font-family: arial;"><b>A UN AÑO DE PANDEMIA EN EL SALVADOR.</b></span></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="color: black; mso-ansi-language: ES-MX; mso-themecolor: text1;"><span style="font-family: arial;">Los
contrastes nos intrigan. Las segundas y terceras oleadas de infecciones de COVID-19 arrasan continentes,
el oxígeno escasea, encontrar cama en Cuidados Intensivos es quimera en muchas
de las grandes ciudades… Un tercio de millón de personas se enferma cada día en
la India, pero Israel deslumbra al mundo… Chile vacuna masivamente pero está al
borde de un colapso, Uruguay presumía de su manejo de pandemia y al momento se
enfrenta a una crisis de difícil control… El Salvador parecía tener la receta
para el desastre perfecto y, aunque se vivieron momentos de gran drama y la
labor de los médicos de primera línea les ha empujado hasta el límite de su
resistencia física y moral a mediados del año pasado, el país funciona, después
de una cuarentena inédita, con restricciones a medias, hacinamientos de
vértigo… pero sin saturación de hospitales, a pesar de que nuestro programa de
vacunación no ha dado segundas dosis ni siquiera a un 2% de la población. Todos
hemos perdido a alguien y nos hacemos legítimas preguntas: ¿Habremos alcanzado
una infame inmunidad natural de rebaño? ¿Habrá variantes del virus circulando
de modo salvaje en el país? Somos un país de gente joven, probablemente más
resistente a las complicaciones de COVID-19… pero todos hemos visto a
veinteañeros en ventilación mecánica, trágico recordatorio de la impredecible
historia natural de esta enfermedad. Atención: este día hemos recibido algunos
reportes anecdóticos de un incremento de hospitalizaciones… ¿Nuestra fuente? La
mantendremos en reserva.<o:p></o:p></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="color: black; mso-ansi-language: ES-MX; mso-themecolor: text1;"><o:p><span style="font-family: arial;"> </span></o:p></span><span style="font-family: arial;">Pero
hemos sobrevivido. Avanzamos penosamente hacia la luz, sin duda. Iremos dejando
en el camino parte fragmentos de nuestro corazón, por las almas perdidas, por
los discapacitados, por las secuelas propias y ajenas. Despojándonos de falsas
esperanzas, descartando el peso muerto de medias verdades que nunca creímos del
todo, aceptando que no hay balas mágicas contra el ya no tan nuevo coronavirus,
dirigimos la nave guiados por una evidencia que no está a la altura de nuestros
estándares, con una ruta de navegación erizada de escollos… No aceptamos
quedarnos estáticos, el miedo que paraliza o forza al retroceso se ve
neutralizado por el poder de una ciencia en construcción, falible, pero que
aprende de sus errores.</span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">El mayor deseo de este autor es, sin embargo, que un día no sea necesario hablar más de COVID-19,
excepto como curiosidad histórica. Más allá de la crisis sanitaria habrá, de
todos modos, que sobrellevar las graves
repercusiones de la pandemia sobre sociedad y macroeconomía, pero también sobre
la posición existencial, el estilo de vida y las esperanzas de cada ser humano.
Somos resilientes pero nadie saldrá ileso de esta epopeya… En recompensa,
podremos aprender de lo vivido, para recrearnos como seres más pacientes,
tolerantes, compasivos y empáticos.</span> <span style="font-family: arial;">Vale la pena intentarlo… porque confesamos
haber sobrevivido.</span></p><br /></div><p></p>HUGO VILLARROEL ABREGOhttp://www.blogger.com/profile/17961999961329849351noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-14905539.post-37363103497198306722021-04-09T14:00:00.002-06:002021-04-09T14:02:24.999-06:00<p style="text-align: center;"> </p><p style="text-align: center;"><span style="font-family: arial;"><b>Anticiencia: De cómo engañar a las masas.</b></span></p><p style="text-align: center;"><span style="font-family: arial;"><b><br /></b></span></p><p style="text-align: center;"><span style="font-family: arial;"></span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">Las generaciones que estamos soportando los embates de la primera pandemia infecciosa del siglo XXI sufrimos no solo del caos generado por la distribución rampante y salvaje del nuevo coronavirus-19, con su caudal de dolor, aislamiento, miseria, discapacidad y muerte: también somos víctimas de otra oleada igualmente nociva: la desinformación, la más de las veces maliciosa, con fines inconfensables.</span></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: justify;"><span style="font-family: arial;"><br /></span></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">Personas antisistema y anarquistas, de aquellas que quieren ver el mundo en llamas, han habido y habrán, hoy y siempre... la libertad de expresión garantiza su derecho a opinar, a menudo de maneras que retan a nuestros sistemas de valores y las leyes en vigencia y, por lo tanto, el que haya derecho a expresarse no implica que todo lo que digamos quedará impune. Calumnias, rumores potencialmente difamatorios, injurias, todas estas afrentas al bien común deberán ser, eventualmente sancionadas... Pero en el ámbito de las ciencias enfrentamos un nuevo nivel de absurdo: Legos opinando de ciencia, personas sin entrenamiento científico o médico pontificando sobre epidemias, pandemias, COVID-19, vacunas, tratamientos. Como si no fuese suficiente malo este abuso, algunos médicos y otros especialistas de las ciencias de la salud, se dan a la tarea de liberar documentos, vídeos y toda clase de manifiestos que, disfrazados de ciencia de calidad, solo contribuyen al caos general haciendo deducciones tendenciosas, siguiendo agendas para nosotros maliciosas. Hablan ampulosamente de sus títulos y acreditaciones, para barnizarse de autoridad, deslizan conceptos de todos conocidos para hacer sentir a sus audiencias que están recibiendo material de altos quilates y, en giros inesperados, luego deslizan sus conceptos, equívocos, alarmistas, efectistas... Esto es tan anticientífico como el pensamiento de los terraplanistas, como leer el futuro en las cartas del Tarot o la creencia de los antiguamente llamados "médicos invisibles".</span></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: justify;"><span style="font-family: arial;"><br /></span></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">Quiero hacer un llamado a todos: Escuchen a los verdaderos líderes de opinión. No se dejen seducir por estos farsantes que aprovechan al amplia difusión que garantizan las redes sociales para despotricar sobre las vacunas, sobre las mascarillas y el distanciamiento social. Desconfíen de las verdades dogmáticas que estos mercaderes del miedo quieren ofrecer, aparentemente de modo desinteresado y sin provecho... </span></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: justify;"><span style="font-family: arial;"><br /></span></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">Parece que necesitamos vacunas no solo para neutralizar a los virus... sino también contra la estulticia y malevolencia de estos profetas del desastre.</span></div></div><p></p>HUGO VILLARROEL ABREGOhttp://www.blogger.com/profile/17961999961329849351noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-14905539.post-31690278987181289492021-04-02T10:48:00.000-06:002021-04-02T10:48:20.671-06:00<p> </p><p></p><h1 style="text-align: center;"><span style="font-family: arial;">El gran circo del mundo.</span></h1><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj7O-ZVx7xuQxSkx1gAd5JvnAXK9NIyhdYrbUU4Ddv-x42dhLscrJoS-tg1Uv7KHjh-wwle-BMWUWqnYyBD7EWu6bPXhG-xu_7tZf_voj-Gsv9ejjRVlfuxQyCT-0CBC0scvHxPlg/s2048/ARTE+DE+PORTADA+JPG.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="2048" data-original-width="1365" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj7O-ZVx7xuQxSkx1gAd5JvnAXK9NIyhdYrbUU4Ddv-x42dhLscrJoS-tg1Uv7KHjh-wwle-BMWUWqnYyBD7EWu6bPXhG-xu_7tZf_voj-Gsv9ejjRVlfuxQyCT-0CBC0scvHxPlg/s320/ARTE+DE+PORTADA+JPG.jpg" /></a></div><h4 style="text-align: center;"><span style="font-family: arial; font-size: x-small;">Claudio Reyes Altamirano, actor y humorista chileno, modelo para la portada de mi libro "Bienvenidos a mi Circo". Fotografía de mi hijo, Lic. Eduardo Alonso Villarroel, a.k.a Qualia.</span></h4><p></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">El año 2018 publiqué la compilación de cuentos que titulé "Bienvenidos a mi Circo", con el apoyo de Masferrer Editores. Estos cuentos ya habían aparecido esporádicamente en este blog, así como en el sitio web de LetrA-Z, un portal literario que siempre apoyó con entusiasmo mis iniciativas. Al momento se distribuyen ejemplares de la primera reimpresión y sigo recibiendo, con deleite, los comentarios de los lectores. </span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">Es mi intención revitalizar este blog, injustamente olvidado. Me haré el propósito de escribir más y mejor, para transmitir el incesante flujo de ideas y el diálogo interno entre Hugo el médico y Hugo el escritor. Algo de circense hay en este diálogo que a veces importuna mis noches, porque enciende mi fantasía, como de niño me pasaba, en la penumbra del espectáculo.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">Les transcribo el prólogo de mi libro:</span></p><p style="text-align: justify;"></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES-SV" style="font-size: 12pt; line-height: 107%;"><span style="font-family: arial;">El
circo nace, quizá, antes que la palabra misma… Imagino a los primitivos
homínidos haciendo monerías frente a la fogata, resguardados en cavernas, en un
intento por aligerar el dolor y la fatiga, el miedo a las bestias, el hambre y
el rigor del clima. La risa es escapismo, delusión, una salida tangencial de la
realidad, por lo que hay algo de redención en la búsqueda de lo insólito y lo
chocarrero, en dejarse embaucar por magias a sabiendas imposibles. Tanto como
el pan de cada día, requerimos de esa cuota de locura que tan solo en el circo
es lícita, tolerada y hasta alentada. <o:p></o:p></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES-SV" style="font-size: 12pt; line-height: 107%;"><span style="font-family: arial;">Cada
ser humano se reviste de símbolos, actitudes y maneras que lo hacen único: crea
una persona o, más bien, un personaje. Tiene una historia que vivir y que
contar, una historia que va escribiendo al paso: un guión que puede ser
interesante y cautivador, pero más de las veces resulta anodino; rara vez
asistimos al nacimiento de héroes, con signo casi siempre trágico. Bajo las
luces, nuestras vidas se tornan circenses: al son de fanfarrias se hacen saltos
mortales sin red, contorsiones, juegos malabares; se lucha contra fieras pero
también hay cómicas riñas entre payasos. Con o sin aplausos, la función sigue
hasta que el último reflector se extingue, hasta que el compás postrero de la
banda deja de resonar en la atmósfera, que poco a poco se disuelve en el vacío.<o:p></o:p></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES-SV" style="font-size: 12pt; line-height: 107%;"><span style="font-family: arial;">Los
cuentos aquí publicados hablan de esas historias, de esos combates cotidianos.
Al quitar las pelucas y las narices rojas, al lavar el maquillaje, ya de frente
al espejo, queda el alma desnuda y desvalida, pero auténtica, valiente y
humilde. Fuera del personaje, el ser humano se convierte, se redime y encuentra
su salvación, tras bambalinas, sin testigos ni público. Ese es el circo del que
habla el título de esta compilación, no tanto un lugar de risas y barullo… Cada
acto, cada espectáculo invita a reflexionar, a la introspección, a la búsqueda
de algo que solíamos llamar compasión, rara especie en estos tiempos de
satisfacción automática y recompensa mal habida.<o:p></o:p></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES-SV" style="font-size: 12pt; line-height: 107%;"><span style="font-family: arial;">Este
circo es mío y de todos los lectores. Quiero agradecer a las siguientes
personas:</span></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: 12pt; text-indent: -18pt;">Silvia
Yanira Martínez de Villarroel, mi esposa, por sus consejos y paciente revisión
de textos.</span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: 12pt; text-indent: -18pt;">Eduardo
Villarroel Martínez, mi hijo, por aportar un cuento de su autoría a esta
colección: “Tequila y dulces para morir”; agradecimiento adicional por su
artístico trabajo de fotografía para la portada.</span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: 12pt; text-indent: -18pt;">Mónica
Alejandra Villarroel Martínez, mi hija, por su paciente ternura y constante
apoyo.</span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: 12pt; text-indent: -18pt;">Dr.
César Augusto Calderón, rector de la Universidad Salvadoreña “Alberto
Masferrer” amigo íntimo y consejero, quien siempre apoyó este proyecto,
patrocinándolo para hacerlo realidad.</span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: 12pt; text-indent: -18pt;">Profesor
Carlos Alberto Saz, porque puso sus conocimientos al servicio de este texto,
velando por el correcto uso de la lengua española.</span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: 12pt; text-indent: -18pt;">Para
el actor y humorista chileno Claudio Reyes Altamirano, modelo de la portada,
quien supo interpretar a la perfección toda la socarronería pero a la vez toda
la buena intención del autor.</span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: 12pt; text-indent: -18pt;">Quedan
estos cuentos a disposición de los lectores. Como todo en mi vida, no hay aquí
nada escrito que tenga la intención de dañar: es mi mayor deseo ser el mejor de
los prójimos, servir a manos llenas y sin medida.</span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: 12pt; text-indent: -18pt;"><br /></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: 12pt; text-indent: -18pt;">Finalmente la nota de prensa del día de su presentación, en Diario El Mundo, por mi sobrina querida, Gabriela Villarroel.</span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: 12pt; text-indent: -18pt;"><br /></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: 12pt; text-indent: -18pt;"></span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhE1aAf2GwuazHlmv4m59DE9L37Z2xlVA1VM6JbSgjRsz5r3EbvrstgnTB0IGOBBXIpQUxoMsYYCpO-g3BRPsTU-R1d7qsWkMefGgiLzKJZFm_utpDhTmdomDzA46OypcaPX9qq5g/" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="931" data-original-width="627" height="529" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhE1aAf2GwuazHlmv4m59DE9L37Z2xlVA1VM6JbSgjRsz5r3EbvrstgnTB0IGOBBXIpQUxoMsYYCpO-g3BRPsTU-R1d7qsWkMefGgiLzKJZFm_utpDhTmdomDzA46OypcaPX9qq5g/w358-h529/image.png" width="358" /></a></div><br /><span style="font-family: arial; font-size: 12pt; text-indent: -18pt;"><br /></span><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial; font-size: 12pt; text-indent: -18pt;">Hasta pronto, amigos.</span></p><span style="font-family: arial;"></span><p></p>HUGO VILLARROEL ABREGOhttp://www.blogger.com/profile/17961999961329849351noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-14905539.post-3793967295489813772015-12-03T16:09:00.001-06:002015-12-03T16:09:23.825-06:00<br />
<br />
<br />
<div align="center" class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: center;">
<b>PIES
DE BARRO, CORAZÓN DE ORO.<o:p></o:p></b></div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: center;">
<b><br /></b></div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: center;">
<br /></div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: center;">
<b><br /></b></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjiFxisT3huJcObiOEyZmVC7Th6dsTuoqUkb4fS1oj0g_U2Ph17odnklwObIG1ilm51xWbyjhB1Ah8y_j2_eD2NLa0VZuEd2r9pZ8DcopTCc7vvZrlSUizPYSO6Z3WjZ5uNEn6YQw/s1600/IMG-20121017-00058.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjiFxisT3huJcObiOEyZmVC7Th6dsTuoqUkb4fS1oj0g_U2Ph17odnklwObIG1ilm51xWbyjhB1Ah8y_j2_eD2NLa0VZuEd2r9pZ8DcopTCc7vvZrlSUizPYSO6Z3WjZ5uNEn6YQw/s320/IMG-20121017-00058.jpg" width="320" /></a></div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: center;">
<b><br /></b></div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: center;">
<br /></div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: center;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;">
<b> “</b><i><span style="background: rgb(249, 249, 249); font-family: Arial, sans-serif;">Estando tú, oh rey, en tu cama, te vinieron
pensamientos por saber lo que había de ser en lo por venir; y el que revela los
misterios te mostró lo que ha de ser.<o:p></o:p></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;">
<i><span style="background: rgb(249, 249, 249); font-family: Arial, sans-serif;"> “Y a
mí me ha sido revelado este misterio, no porque en mí haya más sabiduría que en
todos los vivientes, sino para que se dé a conocer al rey la interpretación, y
para que entiendas los pensamientos de tu corazón.<o:p></o:p></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;">
<i><span style="background: rgb(249, 249, 249); font-family: Arial, sans-serif;"> “Tú,
oh rey, veías, y he aquí una gran imagen. Esta imagen, que era muy grande, y cuya
gloria era muy sublime, estaba en pie delante de ti, y su aspecto era terrible.<o:p></o:p></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;">
<i><span style="background: rgb(249, 249, 249); font-family: Arial, sans-serif;"> “La
cabeza de esta imagen era de oro fino; su pecho y sus brazos, de plata; su
vientre y sus muslos, de bronce;<o:p></o:p></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;">
<i><span style="background: rgb(249, 249, 249); font-family: Arial, sans-serif;"> “</span></i><i><span style="background: rgb(249, 249, 249); font-family: Arial, sans-serif; font-size: 10.5pt;">Sus piernas, de hierro; sus pies, en parte de hierro y en
parte de barro cocido;<o:p></o:p></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;">
<i><span style="background: rgb(249, 249, 249); font-family: Arial, sans-serif;"> “</span></i><i><span style="background: rgb(249, 249, 249); font-family: Arial, sans-serif; font-size: 10.5pt;">Estabas
mirando, hasta que una piedra fue cortada, no con mano, e hirió a la imagen en
sus pies de hierro y de barro cocido, y los desmenuzó.<o:p></o:p></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;">
<i><span style="background: rgb(249, 249, 249); font-family: Arial, sans-serif; font-size: 10.5pt;">
“Entonces fueron desmenuzados también el hierro, el barro cocido, el
bronce, la plata y el oro, y fueron como tamo de las eras del verano, y se los
llevó el viento sin que de ellos quedara rastro alguno. Mas la piedra que hirió
a la imagen fue hecha un gran monte que llenó toda la tierra”.<o:p></o:p></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;">
<br /></div>
<div align="right" class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: right;">
<span style="background: rgb(249, 249, 249); font-family: Arial, sans-serif;">Libro de Daniel, Capítulo II, versículos 26 al 45.<o:p></o:p></span></div>
<div align="right" class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: right;">
<br /></div>
<div align="right" class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: right;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;">
<span style="background: rgb(249, 249, 249); font-family: Arial, sans-serif;"> Mucho se ha escrito sobre el significado
del sueño de Nabucodonosor, aunque la clave de la interpretación la da el mismo
profeta Daniel. La imagen representa al ser humano, su poder y sus conquistas
en el mundo material: oro, plata, bronce, hierro… y barro. Aunque hay un
innegable sentido histórico en la profecía de Daniel, más nos interesa hacer
hincapié en las connotaciones escatológicas, es decir aquellas vinculadas con
la vida después de la muerte, con la historia de la salvación.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;">
<span style="background: rgb(249, 249, 249); font-family: Arial, sans-serif;"> Los gobernantes y todos aquellos que han
sido favorecidos con cuotas de poder en la sociedad son vistos como una cúpula
de personas notables, con capacidades y habilidades sobresalientes que, puestas
al servicio de la comunidad, ayudan a los pueblos a alcanzar sus legítimas
aspiraciones de paz, justicia, prosperidad y progreso. Inherente a dicho poder
es el derecho de gozar de ciertos privilegios, justos y necesarios, previamente
definidos por las leyes. Nabucodonosor, en el siglo VII antes de Cristo era,
sin duda, el monarca más poderoso del planeta. Pero su poder era, aunque
absoluto en lo terrenal, totalmente impotente ante los misterios de la vida
espiritual. Por eso recurre a sabios y magos que puedan interpretar el
inquietante sueño en que intuye, muy a su pesar, algún tipo de premonición
trágica. Ante el fracaso de sus asesores –y que lleva a su cruel castigo con la
muerte- tan solo Daniel es capaz de dar coherencia profética al sueño que sí,
habla de destrucción. Cabeza de oro, Nabucodonosor (o Belsasar), está en la
cúspide. Pero su legado pasará a otros inferiores a él y de estos a otros aún
menos ilustres aunque no necesariamente más débiles. Al final, el fundamento
del imperio está en la mezcla de hierro y barro: imposibles de ligar entre sí,
el baro se ve quebrantado ante el metal y el metal pierde la sustentación que
le proporciona el barro: es previsible el colapso y la destrucción total de
todo imperio material humano… Todo es pulverizado, esparcido al infinito y luego
olvidado. Y no es mano de hombre la que arranca la piedra del monte, piedra que
destruye los débiles pies del ídolo, piedra que se agiganta hasta llenar todo
el mundo… Estamos ante una metáfora de un poder supremo que no cede ante nada
ni ante nadie y es señal de Sabiduría (sí, con “s” mayúscula) reconocer ese
poder.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;">
<span style="background: rgb(249, 249, 249); font-family: Arial, sans-serif;"> Una de las aspiraciones del ego de muchos
es escalar posiciones para ganar fama, prestigio y riquezas. La permanente
tentación de <i>tener</i> más sobrepasa con
mucho a la aspiración de <i>ser</i> más.
Esclavos de sus posesiones y de sus lugares preferentes en la sociedad, muchos
buscan ser esa cabeza de oro, la cúspide. Otros, llenos del fuego del amor y de
Espíritu Santo, se sienten como vasijas del mismo barro con que están hechos
los pies del ídolo, humildes, se ponen al final de la fila y rechazan honores y
títulos vacíos, más bien dispuestos a una comunión fraterna que no sabe de
categorías ni prebendas. Así, entre reyes y ermitaños, medramos la inmensa
mayoría de los miembros de la especie, entre la plata, el bronce y el hierro,
tratando de hacer aleaciones imposibles, con la ilusión de que viviendo en la
tibieza podremos navegar sin naufragar en este océano de vicisitudes que
llamamos “vida”.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;">
<span style="background: rgb(249, 249, 249); font-family: Arial, sans-serif;"> ¿Dónde está nuestro corazón? De seguro
allí mismo donde hemos puesto nuestros tesoros. ¿Qué clase de tesoro es éste?
Cada uno conoce la respuesta en lo más íntimo de su ser. ¿Somos de ese barro
humilde que el soplo divino transformó en vida? ¿Somos vasijas toscas y vacías,
listas para llenarse hasta los bordes con la Gracia del Espíritu Santo? ¿O
acaso nos hemos dorado por fuera, para deslumbrar, para sentirnos más y
mejores? A la humilde vasija de barro no le importa convertirse en polvo,
porque de allí ha sido formada, no por méritos sino por amor, por Gracia… Es
Nuestro Señor que nos levantará del sepulcro frío, nos purificará y concederá
un lugar cerca de sus pies, porque nos consideramos pequeños e indignos Él nos
enaltecerá. Pero si nos creemos oro puro y olvidamos los pies de barro, ¿qué
será de la cabeza fulgurante y llena de orgullo cuando el ídolo se desplome?
Seremos borrados de la historia y tampoco seremos dignos de perdón: el que se
enaltezca será humillado dijo Cristo.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;">
<span style="background: rgb(249, 249, 249); font-family: Arial, sans-serif;"> Seamos como niños. Dejemos de edificar
ídolos de oro, no construyamos más torres de Babel… Hablemos el idioma único
del Amor, sus palabras más bellas son paciencia, tolerancia, respeto.
Cultivemos la Fe y no sintamos vergüenza de pedirla, para vivir con la
confianza de un mundo perfectible pero que en nada podría compararse con la
Gloria Eterna que nos espera si, de verdad y con corazón contrito, podemos
tomar cada uno su Cruz y seguir al Amigo, Padre, Hermano y Pastor, Jesús de
Nazareth.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;">
<br /></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;">
<span style="background: rgb(249, 249, 249); font-family: Arial, sans-serif;"> Amén. <o:p></o:p></span></div>
HUGO VILLARROEL ABREGOhttp://www.blogger.com/profile/17961999961329849351noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-14905539.post-67604152720734792062015-02-22T21:40:00.002-06:002015-02-22T21:40:16.355-06:00<br />
<br />
<br />
<br />
<br />
<span class="Apple-style-span" style="font-size: large;">Amigos:</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-size: large;"><br /></span>
<span class="Apple-style-span" style="font-size: large;">Después de casi dos años de ausencia vuelvo a la carga.</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-size: large;">Este es un proyecto muy querido que quiero someter a su consideración.</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-size: large;">Bienvenidos serán sus comentarios.</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-size: large;"><br /></span>
<span class="Apple-style-span" style="font-size: large;">Hugo Villarroel.</span><br />
<br />
<br />
<br />
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 20.0pt; line-height: 115%; mso-bidi-font-size: 11.0pt;">VIDA 2.0<o:p></o:p></span></div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<br /></div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 14.0pt; line-height: 115%; mso-bidi-font-size: 11.0pt;">Por<o:p></o:p></span></div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 14.0pt; line-height: 115%; mso-bidi-font-size: 11.0pt;">Hugo Villarroel-Ábrego<o:p></o:p></span></div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhurlexlIVQ8olxQqaWMcSWyD80aNVyZEyGKopz_9u3FbD6UH5KCzPMr8Wgj1Q0yezJW-rYp6eVAYQx0gqK5jmG9sDQMoyH5t0fBIx5_NfpHaWCa_6_h0CpI9muljYNBTDnLnXhyw/s1600/LUZ.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhurlexlIVQ8olxQqaWMcSWyD80aNVyZEyGKopz_9u3FbD6UH5KCzPMr8Wgj1Q0yezJW-rYp6eVAYQx0gqK5jmG9sDQMoyH5t0fBIx5_NfpHaWCa_6_h0CpI9muljYNBTDnLnXhyw/s1600/LUZ.JPG" height="311" width="400" /></a></div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 14.0pt; line-height: 115%; mso-bidi-font-size: 11.0pt;"><o:p><br /></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 14.0pt; line-height: 115%; mso-bidi-font-size: 11.0pt;">INTRODUCCIÓN.<o:p></o:p></span></div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 14.0pt; mso-bidi-font-size: 11.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>“¿Es realmente aire lo que estás
respirando?”<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 14.0pt; mso-bidi-font-size: 11.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 14.0pt; mso-bidi-font-size: 11.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Es una pregunta que casi ofende al
sentido común, pero que invita a una reflexión detenida sobre todo aquello que
consideramos inamovible y exacto, más allá de cuestionamiento. La pregunta la
formula Morpheus a Neo, en una escena de la exitosa película de los hermanos
Wachowski, <i style="mso-bidi-font-style: normal;">The Matrix</i>, en donde la
tiranía de las máquinas ejerce control absoluto sobre la vida de los seres humanos,
apenas reducidos a fuente renovable de energía, combustible vivo. Como en la
película, he reflexionado, muchos de los miembros de la especie hemos llegado a
convertirnos en el combustible de un sistema complejo de supervivencia
hipertecnológico, en donde el significado de la criatura humana está definido
en términos de productividad, capacidad de competir y alcanzar esa meta
nebulosa que los gurús y apóstoles postmodernos llaman “éxito”. El sistema, que
parece tomar vida propia y lo abarca todo, desde el nacimiento hasta la muerte,
distingue por tanto, entre personas “exitosas” y “fracasadas”, en otras
palabras, “ganadores” y “perdedores”. Mientras, y para no sucumbir al
aburrimiento existencial, a la atrofia de la mente que también desgasta la
envoltura corporal, nuestros cerebros son aturdidos alegremente con un mundo “virtual”,
es decir, generado por artificio, todo un universo de realidades sintéticas en
donde nos movemos con aparente ilusión de autonomía y libertad. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 14.0pt; mso-bidi-font-size: 11.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;">
</span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 14.0pt; mso-bidi-font-size: 11.0pt;"> A mucho de esto llamamos
“vida”: nacer, recibir un nombre, socializar, adaptarse a los mandatos escritos
y no escritos sobre el comportamiento deseable, obtener una educación formal
que sirva de base para ganar reconocimiento y acceder al mercado laboral. En
paralelo, se encuentran amigos, se encuentra pareja, se funda una familia y se
introduce a los hijos en el sistema. Si todo sale bien, al llegar a cierta
edad, con la jubilación, se gana el derecho a dejar el puesto de trabajo en la
colmena y buscar tiempo para recreación, malcriar nietos y acudir a todas las
citas con médicos especialistas necesarias después del desgaste físico y mental
de décadas. Cuando llega la muerte solo oramos para que no sea lenta y dolorosa
y haber tenido tiempo para dictar el testamento, en caso de haber escamoteado
algún excedente de producción a la codicia del mercado de consumo, tan
omnipresente como seductor.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 14.0pt; mso-bidi-font-size: 11.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 14.0pt; mso-bidi-font-size: 11.0pt;"> Suena instintivo y carente de alma, como
si no hubiese gran diferencia con respecto al conocido ciclo vital de las
especies que gustamos en llamar “inferiores” y que estudiamos en la escuela:
nacer, crecer, reproducirse y morir. Pues aunque las existencias individuales
podrían y deberían estar llenas de ricos y complejos matices emocionales e
imbuidas en una profunda espiritualidad, millones de personas en todas las
épocas viven ―o mejor dicho, sobreviven― adscritos a rutinas maquinales en
donde el reloj, los memorándum y la máquina para marcar tarjeta son los
tiránicos dictadores. El problema no radica, sin embargo, en la existencia de
una rutina en el trabajo. Por el contrario, la disciplina, la puntualidad y el
cumplimiento de las normas son ingredientes básicos para una productividad
óptima, tanto desde el punto de vista del trabajador como desde la óptica del
empresario o institución laboral. Lo trágico es que millones de personas pasan
media vida haciendo cosas que detestan en ambientes alienantes para tener
acceso a los recursos materiales que necesitan (o creen necesitar), mientras
vegetan la otra mitad de su vida quejándose con amargura de ello, evadiéndose de
la realidad con actividades puramente lúdicas o emociones fuertes, a veces
ilícitas, dejándose vencer por todo tipo de adicciones y siempre sintiendo, en
el fondo de sus corazones, que esto no puede ser todo, que falta algo que no
encuentra en las maratones televisivas, ni en los fines de semana en hotel todo
incluido, ni en las pantallas de sus teléfonos inteligentes, ni en las redes
sociales.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 14.0pt; mso-bidi-font-size: 11.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 14.0pt; mso-bidi-font-size: 11.0pt;"> Esa sensación de que “falta algo” es, en
realidad, una oportunidad de cambio, un motor para el renacimiento de la
curiosidad innata del ser humano, adormecida por secuencias predecibles de
eventos, en especial cuando las necesidades de seguridad física, residencia
digna y alimentación suficiente han sido<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>subsanadas y aparece el aburrimiento existencial: “¿Y ahora qué?” Pero
aún en las condiciones más precarias o miserables, cuando la misma dignidad del
ser humano ha sido pisoteada con vileza, en circunstancias tan terribles a menudo
afloran a la superficie lo más poético, dulce y trascendente de las personas.
El “súper amor” de los no violentos, que ofrece flores, bendiciones y plegarias
al embate de los depredadores de la especie, es capaz de sobreponerse,
sobrevivir y, eventualmente triunfar sobre sus verdugos. Piénsese en Jesús y la
victoria del cristianismo primitivo sobre Roma, recuérdese la odisea del
Holocausto de los judíos a manos de la Alemania nazi, y tráiganse a cuenta las
vidas y luchas de personajes como Mahatma Gandhi, Nelson Mandela</span><span style="color: black; font-family: "Arial","sans-serif"; font-size: 7.5pt;"> </span><span style="color: black; font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 14.0pt;">y <span class="apple-style-span">Tenzin Gyatso</span></span><span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 14.0pt; mso-bidi-font-size: 11.0pt;"> (XIV Dalai
Lama), para citar algunos emblemáticos ejemplos.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 14.0pt; mso-bidi-font-size: 11.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 14.0pt; mso-bidi-font-size: 11.0pt;"> Si sentimos que “falta algo” es nuestra
prerrogativa decidir si es necesario buscar ese “algo” antes que lo que
consideramos una pequeña fisura en el mapa de nuestra vida llegue a
convertirse, como ha ocurrido a tantas personas, en un verdadero abismo de
vacío existencial y desesperanza. Si podemos encontrar un “algo”, será
necesario definir si es pieza vital para la existencia, para ser felices, para
trascender más allá de lo puramente material. Si no lo es quizá hemos hecho la
búsqueda equivocada, nos habrá fallado la puntería intuitiva para lograrlo, porque
la respuesta correcta haría aflorar de manera inmediata una sonrisa y un estado
de iluminación: un ¡eureka! resonará en nuestras mentes y llenará de gozo y
gracia nuestros espíritus. Aunque sea por curiosidad vale la pena el esfuerzo.
Pero más allá del instinto de explorar yace, en el cerebro humano y en la mente
que lo ocupa como residencia material, una sed de entendimiento que, canalizada
por las vías correctas, puede contribuir a la comprensión de por qué estamos
aquí, por qué tenemos una conciencia capaz de trascender, de qué sirve dicha
trascendencia y, finalmente, encontrar un sentido a la vida. Habiendo
encontrado un sentido deviene la intención de vida que, a su vez, ilustra las
decisiones trascendentales, las que potencian las conductas que darán forma a
la historia: somos co-creadores de este Universo complejo y a veces, en
apariencia, absurdo.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 14.0pt; mso-bidi-font-size: 11.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 14.0pt; mso-bidi-font-size: 11.0pt;"> Así, podemos hablar de llegar a ser los
verdaderos “arquitectos de nuestro destino”, parafraseando al poeta. A esto le
llamo<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>“Vida 2.0”, una propuesta en
construcción, un manifiesto, o quizás apenas un borrador de manifiesto, para
redefinir necesidades, alcances y objetivos, una propuesta en busca de un
sentido personal para existir. El término “Vida 2.0” quizás no sea muy
apropiado en términos de la complejidad de la existencia humana. Nuestra vida
no puede eliminarse como programa operativo anticuado y ser sustituida por otra
plataforma tecnológica de un plumazo, como si se tratase de un ordenador de
escritorio… Aunque ya ha ocurrido para algunos seres iluminados, cuya
conciencia se ha expandido y trascendido en circunstancia extraordinarias.
Desmontar las estructuras psicobiológicas ancestrales que se han acumulado en
los estratos primitivos del cerebro durante milenios, pero que ya no responden
histórica ni culturalmente a las necesidades y prioridades del Ser es labor
ardua pero emocionante, el trabajo de toda una existencia y de muchas otras
existencias después de la nuestra. Si el trabajo queda inconcluso podemos legar
el Conocimiento y la Sabiduría obtenidos a una nueva generación de guerreros
del espíritu, dispuestos a tomar la estafeta y superarnos en todos los ámbitos,
de pie sobre los hombros de sus predecesores. Pero, en un sentido íntimo, Vida
2.0 es una realidad que puede vivirse ya, desde el mismo momento en que se lean
estas letras, si es que no nos basta sobrevivir como hasta ahora, si intuimos
que la pieza que falta es precisamente la más importante, la que daría sentido
a la aventura cosmobiológica de vivir. Se trata de una decisión personal.
Espero que, si una decisión de esta naturaleza es relevante para algún lector,
este proyecto de ensayo sirva como introducción a una búsqueda que es universal pero que
representa también una lucha íntima, personal e irrepetible. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 14.0pt; mso-bidi-font-size: 11.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 14.0pt; mso-bidi-font-size: 11.0pt;"> En las secciones subsecuentes, después de
revisar algunas historias de vida, plantearé mi propuesta, ecléctica y muy
personal, sobre cómo afrontar estos dilemas vitales, cómo entender mejor el
mundo y cómo a pesar del espíritu dominante de los tiempos, cargado de egoísmo,
negación y búsqueda afiebrada del placer inmediato y a cualquier costo, aún es
posible ser feliz, productivo y útil al prójimo. No pretendo sentar cátedra, no
pretendo pontificar ni hacer creer a nadie que he logrado la iluminación:
apenas me considero un caminante que, tambaleando, endereza sus primeros pasos,
cegado por la luz. Pero mi trabajo como médico, mis estudios y observaciones
personales y, mucho más importante, los testimonios de vida y muerte que he ido
recolectando durante años de práctica me dan la solvencia moral para presentar
a los lectores esta visión particular. Dicha visión tiene una base cristiana,
pero se extiende mucho más allá de cuestiones litúrgicas o religiosas; como
hombre de ciencia organizo las ideas en sistemas jerárquicos, siguiendo una
aparente secuencia de causa y efecto… Pero la esencia de dichas ideas pretende
trascender el horizonte de lo material y demostrable. Me justifica el haber
sido testigo de mucho dolor, de angustias y esperanzas por igual; el haber sido
médico y confidente de sabios, ricos, pobres e iletrados, de santos y demonios.
He visto el horror y la gracia, la miseria física y la grandeza espiritual de
grandes hombres y mujeres… He corregido y he sido redireccionado, he reído y
llorado por partes iguales… Así que considero mi deber respetar la privacidad
de tantos héroes y heroínas que han enriquecido mi vida con sus vivencias,
manteniendo en secreto sus verdaderas identidades. Espero que esta propuesta pueda
perfeccionarse de manera progresiva si, como es mi propósito, me es permitido
avanzar unos pasos más por la senda correcta, antes de rendir cuentas a la
divinidad.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<br /></div>
<div align="right" class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: right;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 14.0pt; mso-bidi-font-size: 11.0pt;"><br /></span></div>
<div align="right" class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: right;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 14.0pt; mso-bidi-font-size: 11.0pt;">Hugo Villarroel-Ábrego.<o:p></o:p></span></div>
HUGO VILLARROEL ABREGOhttp://www.blogger.com/profile/17961999961329849351noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-14905539.post-37244245659619942502013-06-13T09:27:00.000-06:002013-06-13T09:28:11.986-06:00<br />
Amigos, ojalá disfruten la lectura de este editorial.<br />
<br />
Hugo V.<br />
<br />
<br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; line-height: 16px;"></span><br />
<div class="seccion" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-color: rgb(102, 102, 102); border-bottom-style: solid; border-bottom-width: 1px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; color: #069edd; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 11px; font-weight: bold; margin-bottom: 9px; margin-left: 0px; margin-right: 292px; margin-top: 0px; padding-bottom: 9px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0) 0px 0px 1px; text-transform: uppercase; vertical-align: baseline;">
<a href="http://www.laprensagrafica.com/tenemos-un-gran-problema#" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; color: inherit; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 11px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0.0078125) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">OPINIÓN</a></div>
<span class="Apple-style-span" style="color: #111111; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: large; font-weight: bold; line-height: 16px;"> Tenemos un gran problema</span><br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
<a href="http://www.laprensagrafica.com/tenemos-un-gran-problema">http://www.laprensagrafica.com/tenemos-un-gran-problema</a></div>
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; line-height: 16px;"></span><span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; line-height: 16px;"></span><br />
<div class="fechaautor" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-style: normal; font-weight: bold; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 14px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-align: center; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; line-height: 16px;"><br /></span></div>
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; line-height: 16px;">
<div class="fechaautor" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-style: normal; font-weight: bold; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 14px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-align: center; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
13 de Junio de 2013</div>
<div class="fechaautor" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-style: normal; font-weight: bold; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 14px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-align: center; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
Hugo Villarroel Ábrego</div>
<div class="abstract" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; line-height: 22px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 12px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-align: justify; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<b>En un memorable episodio de la serie de televisión “Los Tres Chiflados”, Larry le dice a Moe: “Tenemos un gran problema”. Moe comenta: “Se requerirá de mucha inteligencia para salir de esto”. “Por eso digo –replica Larry– que tenemos un gran problema.”</b></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgaye0rwaXOhmqtOm16-Y13sDNUoGsL33MiIXv9GptwJ2K4G8IF1Y-tnPVEGTZSyPcJZ-XmewP4d1Rdj6iEtzGmni-WUAzzjsLjj5CW1rbN7aZPfh6_H4huklQyYuhyG2F9hm-fdw/s1600/Pink+cluster.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="304" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgaye0rwaXOhmqtOm16-Y13sDNUoGsL33MiIXv9GptwJ2K4G8IF1Y-tnPVEGTZSyPcJZ-XmewP4d1Rdj6iEtzGmni-WUAzzjsLjj5CW1rbN7aZPfh6_H4huklQyYuhyG2F9hm-fdw/s320/Pink+cluster.JPG" width="320" /></a></div>
<div class="abstract" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; line-height: 22px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 12px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-align: center; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<b><br /></b></div>
</span><br />
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; line-height: 14px;">En El Salvador vivimos en crisis crónica, a ratos con momentos álgidos que hacen noticia. Sin problemas que resolver no habría oportunidades para mejorar y conviene una ocasional actitud revisionista para detectar fallos, corregir el rumbo y apuntar a sueños novedosos para un pueblo que parece naturalmente acondicionado al sufrimiento.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; line-height: 14px;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; line-height: 14px;">Vulnerables por geografía, hambrientos de justicia, endeudados, sitiados por delincuentes y cargados de tributos, cada uno de nosotros tiene una visión particular de cómo afrontar estas catástrofes cotidianas. Por eso, a través del ejercicio de una democracia representativa, se espera que nuestras peticiones, ideas y sugerencias libremente expresadas (¿es mucho pedir?) puedan llegar a oídos de quienes en su momento tomen las riendas del gobierno y afronten con coraje los retos que hoy nos parecen insuperables.</span><span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; line-height: 14px;">Se requiere de intenso trabajo intelectual para encontrar caminos transitables y no atajos, soluciones correctas a mediano plazo y no triquiñuelas logísticas para capear el temporal. Pero sobre todo estamos urgidos de tolerancia y compasión, de la otra inteligencia, de inteligencia emocional. Ser compasivo obliga a compartir la pasión del que sufre y ser tolerante garantiza un espacio para todas las voces, aun las disonantes, aun aquellas que están reñidas con nuestras creencias.</span><span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; line-height: 14px;">Debemos admitir que nos falta mucho para presumir de estas virtudes que demandan mucha faena espiritual, pero cada vez hay más síntomas de que esta generación de salvadoreños (que aún no estrena documento único de identidad o que votará en elecciones por primera vez el próximo año) será el agente de cambio que tanto urge a esta sociedad convulsa y adicta a las emociones fuertes.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; line-height: 14px;">No todos nuestros jóvenes nos darán satisfacciones, pero muchos de ellos ya piensan, sienten y actúan distinto a sus ancestros: ven al mundo como patria única, se globalizaron de golpe y empequeñecieron el planeta con sus plataformas informáticas; se sienten como en casa en cualquier lugar y están listos para luchar por sus libertades a pesar de que no vivieron en guerra, como tantos de nosotros.</span><span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; line-height: 14px;">No bastan los discursos rimbombantes que, al escucharse con los ojos cerrados, nos hacen pensar que vivimos en Shangri-La o algún otro remoto y maravilloso sitio. Tampoco bastan los vociferantes llamados a tomar las banderas y recuperar identidades supuestamente perdidas: hay momentos pertinentes para ciertas posturas ideológicas y si no se ajustan las ideas a la evolución histórica quedamos desfasados y anacrónicos, fósiles que solo merecen la atención de los arqueólogos de la política. Tampoco necesitamos cancioncillas estúpidas concebidas para infiltrar eslóganes baratos en nuestras mentes: demasiado alienados estamos ya con la avalancha informática que la vida moderna nos impone.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; line-height: 14px;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; line-height: 14px;">¿Qué necesitamos? ¿Por qué nuestra joven y consumista democracia no despega? No culpemos solo a funcionarios y políticos porque también son pueblo y nosotros mismos los entronizamos en el poder. Es obligación de todos apostar al talento innato, comprometernos a servir a los demás con humilde y honesto desapego, cada quien según su condición. Pero a los funcionarios pido respetar la inteligencia del pueblo y, aceptando la dura realidad, presentar agendas creíbles de trabajo sin paraísos de oropel a la vuelta de la esquina, porque el trabajo es mucho y los obreros son escasos.</span><span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; line-height: 14px;">A diferencia de Los Tres Chiflados, los salvadoreños sí tenemos astucia necesaria para salir del atolladero... pero astucia sin decencia, sin respeto, sin compasión, sin tolerancia, esa es la raíz de todas las desgracias del género humano.</span></div>
HUGO VILLARROEL ABREGOhttp://www.blogger.com/profile/17961999961329849351noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-14905539.post-7429818727648283462013-04-02T08:05:00.002-06:002013-04-02T08:12:06.171-06:00<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="color: #069edd; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-weight: bold; line-height: 16px; text-transform: uppercase;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-weight: bold; line-height: 16px; text-transform: uppercase;"><span class="Apple-style-span" style="color: purple;">Amigos, dejo este editorial para su consideración.</span></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-weight: bold; line-height: 16px; text-transform: uppercase;"><span class="Apple-style-span" style="color: purple;">con gran afecto,</span></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-weight: bold; line-height: 16px; text-transform: uppercase;"><span class="Apple-style-span" style="color: purple;"><br /></span></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-weight: bold; line-height: 16px; text-transform: uppercase;"><span class="Apple-style-span" style="color: purple;">hugo villarroel ábrego.</span></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="color: purple; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif;"><span class="Apple-style-span" style="line-height: 16px; text-transform: uppercase;"><b><br /></b></span></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="color: #069edd; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-weight: bold; line-height: 16px; text-transform: uppercase;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<div style="text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="color: #069edd; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-weight: bold; line-height: 16px; text-transform: uppercase;"><span class="Apple-style-span" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; color: inherit; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: x-small; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;"><a href="http://www.laprensagrafica.com/No-queremos-martires#" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; color: inherit; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">OPINIÓN</a></span></span></div>
</div>
<div style="text-align: justify;">
<div style="text-align: center;">
<a href="http://www.laprensagrafica.com/No-queremos-martires">http://www.laprensagrafica.com/No-queremos-martires</a><span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; line-height: 16px;"></span></div>
</div>
<div class="unit noticiaheader" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; display: block; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 13px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 23px; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<div class="container" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; display: block; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<div class="tema" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; color: #111111; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 11px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<a href="http://www.blogger.com/blogger.g?blogID=14905539" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; color: inherit; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 11px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0.0078125) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;"></a></div>
<h2 class="titulo" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; color: #111111; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-style: normal; font-weight: bold; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 9px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 14px; text-align: center; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<span class="Apple-style-span" style="font-size: large;">No queremos mártires</span></h2>
</div>
</div>
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; line-height: 16px;"></span><br />
<h3 style="text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; line-height: 16px;"><span class="Apple-style-span" style="color: red;">La Prensa Gráfica, 2 de Abril de 2013</span></span></h3>
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; line-height: 16px;">
</span>
<br />
<h3 style="text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; line-height: 16px;">
<span class="Apple-style-span" style="color: red;">Por Hugo Villarroel Ábrego</span></span></h3>
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; line-height: 16px;">
</span><span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; line-height: 22px;">Todos sabían que era inocente, pero eso no era importante. Sus enemigos querían matarlo y estaban dispuestos a pagar un alto precio. Al final, solo fue necesario un modesto desembolso y hacer presión en ciertos círculos de poder. </span><br />
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif;"><span class="Apple-style-span" style="line-height: 22px;"><br /></span></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; line-height: 16px;"></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiyTsQ43jyrZ4lDS23_kS34kd3Je1tQOeHD4n_TgCh1AeP5unm1nsp6BHoCCI2R3BsHyc_HxONU57zL-X54YhccGdAH53HD8VaI8uXMVtyak8-pn7CjevtjJuH0fBKwXDpCvjwNZA/s1600/LOS+CIELOS+PARISINOS.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiyTsQ43jyrZ4lDS23_kS34kd3Je1tQOeHD4n_TgCh1AeP5unm1nsp6BHoCCI2R3BsHyc_HxONU57zL-X54YhccGdAH53HD8VaI8uXMVtyak8-pn7CjevtjJuH0fBKwXDpCvjwNZA/s400/LOS+CIELOS+PARISINOS.JPG" width="400" /></a></div>
<div class="article-body" id="article-body" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-color: rgb(204, 204, 204); border-bottom-style: solid; border-bottom-width: 1px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; line-height: 14px; margin-bottom: 20px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 20px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-align: center; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-size: x-small;"><span class="Apple-style-span" style="color: purple;"> </span></span></div>
</div>
<div class="article-body" id="article-body" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-color: rgb(204, 204, 204); border-bottom-style: solid; border-bottom-width: 1px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; line-height: 14px; margin-bottom: 20px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 20px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<div style="text-align: justify;">
Pero antes de matarlo debía ser desprestigiado, humillado, ridiculizado y definido como criminal de la más baja ralea, para sentar un precedente: No se toleraría que nadie cuestionara la autoridad y el poder de los fariseos, por lo que se montó un juicio burdamente arreglado y la vida de Jesús de Nazaret quedó a merced de aquellos hipócritas que tan bien había descrito nuestro Señor: sepulcros blanqueados repletos de inmundicia, soberbia y corrupción. Los había denunciado cara a cara, desnudando su falta de caridad, su amor por el lujo y el trato preferente... Pero ante el Sanedrín tergiversaron su mensaje, pusieron palabras en su boca, sacaron sus enseñanzas de contexto y presentaron testigos falsos. Jesús enfrentó a sus detractores con humilde sabiduría, conocedor de que ni el Hijo de Dios Vivo podía librarse de la maldad de los hombres. Dos mil años después, en un mundo de libertad de expresión, declaraciones de derechos humanos, salvaguardas jurídicas para los debidos procesos y garantías constitucionales, el drama más grande de todos los tiempos se escenifica de manera cotidiana, una y otra vez. Monseñor Óscar Arnulfo Romero también irritó a muchas personas, denunció injusticias e iniquidades, se defendió con humildad, supo vencer el temor natural a la muerte y a sabiendas que su martirio era inminente, igual a Cristo, obedeció a su conciencia y a la voluntad del Padre Eterno, entrando en la inmortalidad hace treinta y tres años.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Han sido muchos los héroes caídos, defensores de la no violencia, de la reconciliación, de la resistencia pacífica ante los opresores... Mahatma Gandhi y Martin Luther King hacen presencia inmediata en nuestra memoria. El pensamiento humano evoluciona, las ciencias sociales y naturales se perfeccionan, la técnica ha domeñado gran parte del mundo natural y el ser humano se enseñorea de ese mismo mundo... Pero a nadie se le escapa que todos los días, en todas las latitudes, amparados en la impunidad del poder, enmarañados en una red de influencias y favores inconfesos, los mismos desalmados de siempre van a la caza de los campeones de la verdad y de los defensores de los humildes, de los desamparados, de los que no tienen voz. Muchos dan ejemplo de digno desempeño y noble corazón, legislan con bondad, juzgan sin parcialidad, hacen su trabajo con amor y humilde entrega, me consta, conozca muchos de ellos, honestos y decentes. Pero hay otros que medran en las tinieblas y, como lo dice Roger Waters: “Operan las oscuras y satánicas maquinarias que fabrican el infierno en la tierra”. ¿Por qué? Porque hay intereses inconfesables que escapan a la comprensión de los ciudadanos comunes y corrientes, como el que escribe. Afilan sus guillotinas para decapitar a todo aquel que exhiba los peligrosos síntomas que activan todas las alarmas: El buen pastor que apacienta sus ovejas, el justo juez que lucha por dar credibilidad al sistema, el político visionario que sueña con una sociedad menos hostil para con los humildes. Como dijo Cristo a Simón Pedro: “Mira que Satanás ha pedido permiso para sacudirlos a ustedes como trigo que se limpia”. El justo seguirá siendo probado frente al mal, hasta el fin de los tiempos.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Salvadoreños: justos e injustos somos todos hermanos. Haya perdón entre nosotros. Construyamos un país de personas inocentes, con espacio digno para todos, espacio quizá pequeño, quizá pobre, pero en el que no se requiera de mártires, nunca más.</div>
</div>
HUGO VILLARROEL ABREGOhttp://www.blogger.com/profile/17961999961329849351noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-14905539.post-70724857736632598802013-03-05T07:22:00.001-06:002013-03-13T11:58:43.501-06:00<br />
<span class="Apple-style-span" style="color: #069edd; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 11px; font-weight: bold; line-height: 16px; text-transform: uppercase;"><a href="http://www.laprensagrafica.com/Hijos-meritisimos#" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; color: inherit; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 11px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0.0078125) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">OPINIÓN</a></span><br />
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; line-height: 16px;"></span></div>
<div class="unit noticiaheader" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; display: block; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 13px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 23px; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<div class="container" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; display: block; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<div class="tema" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; color: #111111; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 11px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<a href="http://www.blogger.com/blogger.g?blogID=14905539" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; color: inherit; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 11px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0.0078125) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;"></a></div>
<h2 class="titulo" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; color: #111111; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 38px; font-style: normal; font-weight: bold; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 9px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 14px; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Times, 'Times New Roman', serif; font-size: large;">
Hijos meritísimos</span></h2>
<div class="fechaautor" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; color: #999999; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 9px; font-style: normal; font-weight: bold; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 14px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<div style="text-align: center;">
5 de Marzo de 2013 a la(s) 12:0 - Hugo Villarroel Ábrego</div>
</div>
<div class="abstract" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; line-height: 22px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 12px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgn99W6iSQRjBoMVyxx9YJIT_Sk_mVbUBodZp9PNqRZFaHwUiZNzDMop33HvxNlzBpr8fH0WG2vMvgVtb7K5ZjjE7Q2Du0cD9_AB6ZLY0m8iTNYd6VRYZKrSbLJy_ZuFJzf29KHGg/s1600/Sea+of+flowers.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="180" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgn99W6iSQRjBoMVyxx9YJIT_Sk_mVbUBodZp9PNqRZFaHwUiZNzDMop33HvxNlzBpr8fH0WG2vMvgVtb7K5ZjjE7Q2Du0cD9_AB6ZLY0m8iTNYd6VRYZKrSbLJy_ZuFJzf29KHGg/s320/Sea+of+flowers.JPG" width="320" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="color: red;"><b><br /></b></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="color: red;"><b><br /></b></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="color: red;"><b>Un puñado de jovencitos logró la hazaña. No se esperaba tanto de ellos, nadie quería hacerse ilusiones, después de todo no se foguearon mucho y habían perdido casi todos los partidos amistosos. </b></span></div>
</div>
</div>
</div>
<div class="separator" style="clear: both; font-size: 16px; text-align: center;">
</div>
<div class="photoarticle" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; background-attachment: initial; background-clip: initial; background-color: initial; background-image: url(http://dd43a26a5ab0a7e2ac01-394f0f71eea7cc70ccfb2abfdb72df15.r65.cf2.rackcdn.com/images/gray-shadow-280-20.png); background-origin: initial; background-position: 50% 100%; background-repeat: no-repeat no-repeat; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; margin-left: 1em; margin-right: 1em; margin-top: 0px; min-width: 300px; padding-bottom: 25px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; position: relative; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0.00390625) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<div style="text-align: center;">
</div>
<div class="pie_media" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; background-attachment: initial; background-clip: initial; background-color: whitesmoke; background-image: initial; background-origin: initial; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 8px; padding-left: 8px; padding-right: 8px; padding-top: 8px; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0.0078125) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline; width: 284px;">
<div style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; color: black; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; margin-bottom: 5px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0.0078125) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<b style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0.0078125) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;"></b></div>
</div>
</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div class="article-body" id="article-body" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-color: rgb(204, 204, 204); border-bottom-style: solid; border-bottom-width: 1px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; line-height: 14px; margin-bottom: 20px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 20px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<div style="text-align: justify;">
Con el agravante de jugar en terrenos hostiles, no era razonable ni probable para los entendidos en cosas del fútbol que la selección sub 20 de El Salvador rescatase algo más que una aguerrida pero discreta actuación en el campeonato regional que daba plazas para la copa mundial.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br style="-webkit-font-smoothing: antialiased; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0.0078125) 0px 0px 1px;" /></div>
<div style="text-align: justify;">
Cuando ganaron con grandes dificultades el primer encuentro, nadie se emocionó demasiado. Pero cuando los anfitriones los vapulearon llovieron los adjetivos hirientes y los improperios. Sin misericordia la crítica los tildaba de lentos, miedosos, torpes... Como si fuese digno de gente decente ofender cuando lo procedente era consolar, animar y aconsejar. Pero nuestros muchachos no se amilanaron y, dejando de lado el pánico escénico, se prepararon para el próximo partido, el juego de sus vidas. Nadie dijo que iba a ser fácil.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br style="-webkit-font-smoothing: antialiased; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0.0078125) 0px 0px 1px;" /></div>
<div style="text-align: justify;">
A falta de 45 minutos para decir adiós al torneo, perdiendo el juego clave, se requería de una serie de eventos extraordinarios para que el destino sonriera, por una vez en la vida, a nuestro pequeño país y sus gladiadores, casi unos niños. Todavía palpita con fuerza mi corazón al recordar cómo, derrochando facultades y pundonor, se marcaron tres anotaciones en la portería contraria para darle forma y consistencia al sueño histórico de asistir, por vez primera en la historia, a la copa mundial de la categoría. Visaron sus pasaportes para la cita en Turquía, sonriendo entre lágrimas, humildes en la victoria, sin creerse más ni menos que nadie, sin pretensiones, como buenos alumnos de un digno profesor, el director técnico, un viejo zorro de mil batallas con quien la patria está también en deuda. Es justo que ahora celebren, mientras los detractores de salón y los técnicos de cafetín sonríen, complacidos, no sé si un poco avergonzados en el fondo de su corazón.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br style="-webkit-font-smoothing: antialiased; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0.0078125) 0px 0px 1px;" /></div>
<div style="text-align: justify;">
No los conozco pero ya los quiero como si fueran mis hijos. No sé de sus defectos y virtudes más allá de lo futbolístico, pero desde ya los acepto como lo que son, seres humanos que aún están por demostrar lo mejor de su potencial, en un ambiente adverso, sin los merecidos incentivos que sus pares disfrutan en otras latitudes. Y no me importa lo que pase después de ese histórico encuentro futbolístico. Solo sé que soñar en grande cuesta igual que soñar en pequeño y, en los sueños colectivos de los salvadoreños, aspiramos a que nuestra voz también se escuche en el coro de los mejores jugadores del mundo. Y el escenario será muy lejos de casa, donde quizás se sientan muy solos... Tendremos que mimarlos para que nuestro afecto los arrulle en la distancia, aunque no debemos descuidar su disciplina, para que el fuego de su juventud no los consuma en inútiles desconcentraciones. Que no les falte nada para explotar al máximo sus facultades, pero que tampoco haya derroche: no queremos malcriarlos, en cambio aspiramos a perfeccionarlos en cuerpo y espíritu y eso demanda mesura y equilibrio.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br style="-webkit-font-smoothing: antialiased; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0.0078125) 0px 0px 1px;" /></div>
<div style="text-align: justify;">
Alcanzar la madurez futbolística implica prepararlos para lo previsible y lo imprevisible, lo justo y lo injusto, para ser dignos en la derrota y caballerosos en la victoria. Es nuestro deseo verlos crecer en talento sin comprometer su calidad y decencia, más allá del fútbol.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br style="-webkit-font-smoothing: antialiased; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0.0078125) 0px 0px 1px;" /></div>
<div style="text-align: justify;">
Ellos son nuestros hijos meritísimos. Héroes auténticos cuyos nombres y apellidos aún son extraños para la mayoría de los salvadoreños. Honor a quien honor merece y que Dios los colme de bendiciones por habernos dado tanta felicidad.</div>
</div>
HUGO VILLARROEL ABREGOhttp://www.blogger.com/profile/17961999961329849351noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-14905539.post-29763332545325977222012-12-12T15:44:00.002-06:002013-03-11T00:06:19.680-06:00<br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="color: #111111; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: large; font-weight: bold; line-height: 16px;">De la Maestría del Caos al Arte de lo Posible</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; line-height: 16px;"></span></div>
<div class="unit noticiaheader" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; display: block; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 13px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 23px; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<div class="container" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; display: block; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<div class="fechaautor" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 9px; font-style: normal; font-weight: bold; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 14px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-align: justify; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<div style="text-align: center;">
12 de Diciembre de 2012 a la(s) 12:0 - Hugo Villarroel Ábrego</div>
</div>
<div class="abstract" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 18px; line-height: 22px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 12px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-align: justify; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<div style="text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="color: red;">Cuando se habla de “caos” pensamos en desorden, confusión, comportamiento errático e impredecible.</span></div>
<div class="coment" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; background-attachment: initial; background-clip: initial; background-color: initial; background-origin: initial; background-position: 0% 5px; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; display: inline-block; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 18px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 20px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; position: relative; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<a href="http://www.laprensagrafica.com/default.aspx#disqus_thread" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; font-family: BentonSansRE !important; font-size: 10px !important; font-style: normal !important; font-weight: normal !important; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-decoration: none !important; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0.00390625) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;"></a></div>
</div>
</div>
</div>
<div style="text-align: center;">
<a href="http://www.laprensagrafica.com/De-la-Maestria-del-Caos-al-Arte-de-lo-Posible"><span class="Apple-style-span" style="font-size: x-small;">http://www.laprensagrafica.com/De-la-Maestria-del-Caos-al-Arte-de-lo-Posible</span></a><span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px;"></span></div>
<br /><span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; line-height: 14px;"></span>
<div>
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; line-height: 14px;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; line-height: 14px;"><br /></span></span>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEirm0zePsi_xt7Y6oW7fmDNH_S8JNejvLOiddyalBq3802QUa4aEYbbUPgw3lWKSKcw4dPpbMThBSMhSrb72_Lj4OwsEbhyphenhyphenQ5pywWRv6B0Rbk_Ey1hzFuW0PuWM6GxGBpx-aLG50w/s1600/STRRET+ART+-+THIS+IS+SO+ILLEGAL+-+PARIS.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="217" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEirm0zePsi_xt7Y6oW7fmDNH_S8JNejvLOiddyalBq3802QUa4aEYbbUPgw3lWKSKcw4dPpbMThBSMhSrb72_Lj4OwsEbhyphenhyphenQ5pywWRv6B0Rbk_Ey1hzFuW0PuWM6GxGBpx-aLG50w/s320/STRRET+ART+-+THIS+IS+SO+ILLEGAL+-+PARIS.JPG" width="320" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: x-small;"><span class="Apple-style-span" style="line-height: 14px;"><br /></span></span></div>
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; line-height: 14px;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; line-height: 14px;"><br /></span></span>
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; line-height: 14px;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; line-height: 14px;"><br /></span></span></div>
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; line-height: 14px;">
En las religiones que dan una explicación de la génesis del universo, una fuerza superior derrota al caos e instaura un orden supremo. Es necesaria cierta estructura lógica para comprender cómo funciona el mundo, una noción mínima pero lógica para integrarse con éxito en un medio ambiente físico y social a menudo hostil y estresante.</span><br />
<div class="article-body" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-color: rgb(204, 204, 204); border-bottom-style: solid; border-bottom-width: 1px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; margin-bottom: 20px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 20px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<div style="text-align: left;">
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; line-height: 14px;"><br /></span></div>
</div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; line-height: 14px;">En El Salvador, nuestra democracia en construcción, con la torpeza de un bebé, da sus primeros pasos de la mano de hermanos mayores que nos asisten con mayor o menor simpatía en el aprendizaje. Sobrevivimos a muchas calamidades dependiendo, eso sí, de préstamos, asistencia técnica, ayuda humanitaria y donativos. No es de extrañar que muchas cosas no funcionen o que nuestras gestiones e iniciativas causen resultados paradójicos o inesperados, sorprendiendo nuestra capacidad de comprensión. Caos, podría decirse. Pero ese caos es tan solo apariencia. Los poderes del Estado, en pugna constante, las controversias en la elección de funcionarios, las negociaciones más o menos públicas en torno al tema de seguridad, las disidencias tan publicitadas de algunos legisladores son algunos ejemplos de situaciones caóticas que podrían responder a agendas secretas. Por eso me gusta pensar que la obra teatral, el “reality show” que los políticos exhiben a la opinión pública no es otra cosa que una elaborada coreografía de marionetas: ellos tiran de los hilos siguiendo libretos ocultos dignos del Teatro del Absurdo... Pero coherentes o no con el elemental sentido común, estos montajes nos demuestran que la Política es la Maestría del Caos. Mientras deliberamos, estupefactos, tratando de armar un rompecabezas creíble, la acción de verdad ocurre tras bambalinas, inaccesible a la crítica justa y saludable que cada ciudadano tiene derecho a ejercer.</span><span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; line-height: 14px;">No es una situación privativa de nuestro país, ni siquiera del Tercer Mundo. Donde quiera se ejerciten los músculos de los políticos podemos esperar espectáculos más o menos increíbles, caóticos, de modo que la antes citada comprensión del mundo, necesaria para una vida llena de sentido y propósito, está basada, según el criterio de muchos ciudadanos, en especial de los jóvenes, en una mezcla de nihilismo, incredulidad y desconfianza. La falta de transparencia deja demasiado a la imaginación del pueblo o, por el contrario, le priva de la materia prima con que se construye una cultura ciudadana: el acceso a la verdad... Aunque no convenga, aunque duela, aunque nos dé vergüenza.</span><span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; line-height: 14px;">Con muchas asignaturas reprobadas pero con fe en una superación en todos los órdenes, también se debe reconocer en los políticos un potencial creativo para que las cosas funcionen. Así, la Política no sería tan solo la Maestría del Caos, sino el Arte de lo Posible. Y en un buen sentido, apelando al amor patriótico, haciendo un llamado a la honestidad y bondad, las cosas pueden mejorar en este país. El Salvador urge de gente resuelta, capaz de llamar las cosas por su nombre y ventilar con transparencia los puntos más urgentes de la agenda de país. No es correcto subestimar la capacidad de análisis y comprensión del pueblo: aunque el pan y circo de los antiguos estadistas aún tiene impacto para comprar el favor de las masas, estas ya no están engañadas y, conscientes de que por años se les ha estado comprando con baratijas, cada vez cotizan sus votos a un precio más y más elevado.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; line-height: 14px;">De la Maestría del Caos al Arte de lo Posible. Es un cambio de postura existencial que urge para un El Salvador pujante y saludable, del que todos podamos estar orgullosos.</span></div>
</div>
HUGO VILLARROEL ABREGOhttp://www.blogger.com/profile/17961999961329849351noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-14905539.post-55618185037770660702012-11-05T00:20:00.004-06:002013-03-10T23:53:49.287-06:00<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 16px; line-height: 16px;"></span><br />
<div class="unit noticiaheader" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; display: block; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 16px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 13px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 23px; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0.0078125) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<div class="container" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; display: block; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 16px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0.0078125) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<h3 style="text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="background-color: white;">Se buscan héroes.</span></h3>
<div style="text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="background-color: white;"><br /></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhOs5aWQ5jWPnKS1T9HjQg8hXYOd-IYrcjqwC3kHGn3nDVYj456cza_a1Iv53FkFKVR0fgAiU9rwbh9QIv9wxrQeWY5MdNPXftRSCQpazzJGDkaIC-XIwjb4tU27yX3S2AnoAVpFw/s1600/Goodbye+cruel+world.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="229" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhOs5aWQ5jWPnKS1T9HjQg8hXYOd-IYrcjqwC3kHGn3nDVYj456cza_a1Iv53FkFKVR0fgAiU9rwbh9QIv9wxrQeWY5MdNPXftRSCQpazzJGDkaIC-XIwjb4tU27yX3S2AnoAVpFw/s320/Goodbye+cruel+world.jpg" width="320" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="background-color: white;"><br /></span></div>
<div>
<div style="text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="background-color: white;"><br /></span></div>
</div>
<div class="fechaautor" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 9px; font-style: normal; font-weight: bold; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 14px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0.00390625) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<div style="text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="background-color: white;">3 de Noviembre de 2012 - Hugo Villarroel Ábrego</span></div>
</div>
<div class="abstract" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 18px; line-height: 22px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 12px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-align: justify; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<div style="text-align: center;">
<b><span class="Apple-style-span" style="background-color: white;"><br /></span></b>
</div>
<div style="text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="background-color: white; color: red;"><b>La canción de David Bowie y Brian Eno dice: “Podemos ser héroes... Aunque sea por un día”. </b></span></div>
</div>
</div>
</div>
<div class="article-body" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; border-bottom-color: rgb(204, 204, 204); border-bottom-style: solid; border-bottom-width: 1px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; line-height: 14px; margin-bottom: 20px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; padding-bottom: 20px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0.0078125) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<div class="photoarticle" style="-webkit-font-smoothing: antialiased; background-attachment: initial; background-clip: initial; background-color: initial; background-image: url(http://dd43a26a5ab0a7e2ac01-394f0f71eea7cc70ccfb2abfdb72df15.r65.cf2.rackcdn.com/images/gray-shadow-280-20.png); background-origin: initial; background-position: 50% 100%; background-repeat: no-repeat no-repeat; border-bottom-width: 0px; border-color: initial; border-left-width: 0px; border-right-width: 0px; border-style: initial; border-top-width: 0px; float: left; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; font-size: 13px; margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 20px; margin-top: 0px; min-width: 300px; padding-bottom: 25px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; position: relative; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0.0078125) 0px 0px 1px; vertical-align: baseline;">
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
</div>
<div style="text-align: justify;">
<div style="text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="font-size: small;"><br /></span></div>
<span class="Apple-style-span" style="font-size: small;"><br /></span>
<span class="Apple-style-span" style="font-size: small;"><br /></span>
<span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">En el vídeo (un comercial de TV), niños y adultos disfrazados como héroes de cómic juegan y sirven alegremente a su comunidad. Enternecido, reflexiono... Cuando toca el desastre a nuestra puerta surgen lo mejor y lo peor de la condición humana. En los extremos, los idealistas empedernidos viven austeramente, refugiándose en la espiritualidad; otros, apelando a la supervivencia del más fuerte, se tornan depredadores. Inmersos en una cultura de campo de concentración, muchos procuran felicidad viviendo ilusiones de autonomía, pero prisioneros de sus miedos y necesidades de placer. En medio de la desolación surge el mito del héroe, de hombres y mujeres capaces de superar toda miseria para guiarnos hacia un destino mejor. La camiseta de héroe es codiciada pero es difícil dar el ancho, en especial cuando la ruta es cuesta arriba y se acarrea en las espaldas algo más que las propias penas. Estos luchadores honestos gozan de simpatía y admiración pero rara vez de auxilio real. Hasta los santos necesitan agua, pan y descanso, pero el oficio de salvador o rescatista rara vez da réditos materiales. En la naturaleza del héroe auténtico hay una visión universal, compasiva, altruista... Y cuando, guiado por su conciencia incorruptible, se ve obligado a romper con los poderes establecidos y nada contracorriente, pone en riesgo su propio prestigio y seguridad: Deja de ser útil al sistema y es justo en ese momento que todo su valor se pone a prueba.</span></div>
<br style="-webkit-font-smoothing: antialiased; font-family: 'PT Sans Caption', sans-serif; text-decoration: none; text-shadow: rgba(0, 0, 0, 0.0078125) 0px 0px 1px;" />
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">En el currículum del héroe de la vida real no figuran poderes sobrehumanos ni coeficiente intelectual de genio ni una fortuna inmensa. Trabaja con tesón y amor, a menudo sin conciencia del impacto de su obra ni la calidad de su legado. Uno de los primeros héroes que he conocido fue Carlos Perdomo Vidal, mi profesor de sexto grado. Su simpatía y entusiasta estilo de docencia volvían la experiencia educativa algo electrizante. Me enseñó a creer en mi talento, pues a tan tierna edad no sabía si un día estaría a la altura de las expectativas propias y ajenas. Su influencia marcó un antes y un después en mi vida académica y me alentó a no claudicar en mis deseos, sin que él recibiera a cambio nada más que su humilde salario de maestro. Este artículo le rinde un tributo amoroso y más que merecido: Es y ha sido un héroe, mi héroe y el de muchos otros de sus alumnos.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-size: small;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">Sí, urgimos de héroes de carne y hueso, modestos, firmes, decentes. Víctimas de la incertidumbre miramos en derredor, buscando mágicas intervenciones. Los no creyentes sonríen, escépticos. Alzamos la voz ante nuestras autoridades y líderes, a legisladores y ejecutores de la ley... Pedimos señales, pruebas fehacientes de que todo estará bien, garantías de paz y prosperidad. Angustiados, los creyentes piden favores a la divinidad, muchos mortificándose, expiando culpas. Pero la fe verdadera es como estar enamorado, no se requiere de una explicación para entenderla: se sabe que la respuesta a nuestros ruegos está ya escrita en el propio espíritu, desde el amanecer de la conciencia. Y la fe cambia el contenido mental, facilita la percepción de una realidad que desconoce de egoísmos y mezquindades, intrigas y falsedades. Vacía de prejuicios y deseos o temores, la mente rompe sus cadenas y se abre la puerta a la conciencia para ese viaje hacia integrarse con lo divino. Ahora ya son posibles los milagros. Y es entonces que llegamos a entenderlo: Sí, todos podemos ser héroes. Hoy y todos los días de nuestras vidas.</span></div>
</div>
HUGO VILLARROEL ABREGOhttp://www.blogger.com/profile/17961999961329849351noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-14905539.post-83882799282859669042012-10-03T12:29:00.002-06:002012-10-03T13:37:23.816-06:00<div style="text-align: justify;">
</div>
<h1 style="color: #006699; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font: normal normal normal 250%/120% Neuton, Georgia, 'Times New Roman', Times, serif; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="font-size: large;"><b><br /></b></span></h1>
<h1 style="color: #006699; font: normal normal normal 250%/120% Neuton, Georgia, 'Times New Roman', Times, serif; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: small;"><b>Amigos: </b></span></h1>
<h1 style="color: #006699; font: normal normal normal 250%/120% Neuton, Georgia, 'Times New Roman', Times, serif; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: small;"><b>Espero gusten del presente artículo, un homenaje para la República de Corea.</b></span></h1>
<div>
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: small;"><b>La Prensa Gráfica, 3 de octubre 2012.</b></span></div>
<div>
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: small;"><b><br /></b></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: x-small;"><b><a href="http://www.laprensagrafica.com/opinion/editorial/285386-medio-siglo-de-amistad.html">http://www.laprensagrafica.com/opinion/editorial/285386-medio-siglo-de-amistad.html</a></b></span></div>
<h1 style="color: #006699; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font: normal normal normal 250%/120% Neuton, Georgia, 'Times New Roman', Times, serif; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="font-size: large;"><b><br /></b></span></h1>
<h1 style="color: #006699; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font: normal normal normal 250%/120% Neuton, Georgia, 'Times New Roman', Times, serif; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="font-size: large;"><b>Medio siglo de amistad</b></span></h1>
<h2 style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font: normal normal normal 115%/120% Arial, Helvetica, sans-serif; line-height: 15px; margin-bottom: 10px;">
<div style="color: #000033; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; font: normal normal normal 115%/125% Arial, Helvetica, sans-serif; line-height: 21px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;">
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">Hace 50 años la República de Corea del Sur y El Salvador iniciaron relaciones diplomáticas. En El Salvador de 1962 muchos prosperaban ante el auge de un capitalismo industrial en ascenso, pero otros tantos gemían bajo la bota del militarismo que copaba la esfera política. Grandes sectores de población parecían dispuestos a sacrificar su libertad a cambio de una estabilidad macroeconómica fundamentada en el miedo y la sumisión ideológica. En las antípodas, en una pequeña península rodeada de gigantes, empobrecida y dividida por una guerra devastadora, emergía de las cenizas un joven Estado, Corea del Sur.</span></div>
</div>
</h2>
<span class="creditos" style="border-bottom-color: rgb(204, 204, 204); border-bottom-style: dashed; border-bottom-width: 1px; clear: left; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 15px; margin-right: 0px; margin-top: 25px; padding-bottom: 3px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px;"><span class="Apple-style-span" style="color: purple;"><b>Escrito por Hugo Villarroel Ábrego</b></span></span><br />
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgR5BryyZHqYDCny386Tz0oyDHDraHbp0gDv0YQ4RYl9TXYlsYSp7IG7k6ujJ81Rmpo4v59PhSVkMffB1U_cIXTPOBL8xWYLeLwSNq2i9Y9KcaRsEqcG1vyCgOZgpXd9le4Q_2pHg/s1600/Estambres.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="292" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgR5BryyZHqYDCny386Tz0oyDHDraHbp0gDv0YQ4RYl9TXYlsYSp7IG7k6ujJ81Rmpo4v59PhSVkMffB1U_cIXTPOBL8xWYLeLwSNq2i9Y9KcaRsEqcG1vyCgOZgpXd9le4Q_2pHg/s320/Estambres.JPG" width="320" /></a></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><span class="creditos" style="border-bottom-color: rgb(204, 204, 204); border-bottom-style: dashed; border-bottom-width: 1px; clear: left; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 15px; margin-right: 0px; margin-top: 25px; padding-bottom: 3px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px;"><span class="Apple-style-span" style="color: purple;"><b></b></span></span><br /><span class="Apple-style-span" style="color: #666666; font-size: 13px; letter-spacing: 1px; line-height: 15px;"> </span></span></div>
<div style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;">
<div style="text-align: justify;">
Dos razas y culturas diferentes, con herencias e historias disímiles, pero dos pueblos que se tendieron la mano, dispuestos a conocerse, entenderse y ser amigos. Luchadores, laboriosos, acostumbrados al dolor y a la adversidad, emotivos y amables, coreanos y salvadoreños son celosos guardianes de sus tradiciones, gustan de la cortesía y las bondades de la vida familiar. Pero a partir de estas bases comunes, cada nación evolucionó de manera muy particular, no sin crisis, hasta alcanzar su condición y posición actual en el mundo.</div>
</div>
<div style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;">
<div style="text-align: justify;">
Fue en 1962 cuando comenzó a gestarse el “milagro del río Han”: Corea era uno de los estados agrícolas más pobres del mundo pero el ahorro, frugalidad, inversión bien dirigida y, como los mismos coreanos dicen, el fuerte énfasis dado a la educación fueron los ingredientes de una metamorfosis que catapultó al país hacia una élite con poderío económico pero también robustez moral.</div>
</div>
<div style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;">
<div style="text-align: justify;">
Sin sacrificar su esencia, los coreanos luchan por una sociedad soberana, culta, productiva y generosa. Conmovidos por su éxito y deseosos de ser agentes de cambio para países menos afortunados, no han vacilado en compartir tecnología, asistencia en salud, cultura y ayuda económica. La crisis financiera asiática de 1997 hizo tambalear al joven gigante, pero la solidaridad de un pueblo que no sabe rendirse aportó una solución pocas veces vista: la gente sacó el oro de sus cajas fuertes, gavetas y armarios para donarlo al Estado y apuntalar las reservas internacionales. Los frutos se cosecharon pronto y, sin límites a la vista para una expansión pacifista y benévola, el futuro parece halagador para el hermano país y sus ciudadanos, personas que siempre ofrecen “hacer su mejor esfuerzo” cuando se les encomienda una tarea o misión, por difícil que parezca.</div>
</div>
<div style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;">
<div style="text-align: justify;">
Cualquiera se siente orgulloso de amigos así. Corea ofrece un modelo para diseñar soluciones fundamentadas en nuestros propios valores y necesidades. Sin copiar podemos imitar, aprendiendo de maestros buenos y desinteresados. Eventos como los festivales de cine y de K-pop (música y baile pop coreanos), la visita de artistas consagrados y de trabajadores voluntarios para construcción de infraestructura en zonas rurales pobres sirven como marco para celebrar este medio siglo de amable cooperación. Esto ha sido posible por las gestiones del excelentísimo Sr. embajador de Corea y sus asesores, con especial mención para el distinguido señor Hwang Joong-jin, quien me honra con su amistad.</div>
</div>
<div style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;">
<div style="text-align: justify;">
Con tristeza debemos reconocer que el camino que El Salvador ha recorrido ha sido tortuoso, que hemos caminado con lentitud y no hemos puesto aún nuestro mejor esfuerzo. Pero no perdamos la fe: encontremos sentido a nuestra visión de país y, viviendo el sueño, trabajemos con tenacidad, aplicando nuestro natural talento por el tiempo necesario para desatar los nudos que atan nuestra creatividad y podamos despegar, sin más límite que la imaginación, hacia la vida nueva, exitosa y alegre que merecemos.</div>
</div>
<div style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;">
<div style="text-align: justify;">
La República de Corea, nuestra amiga, nos ha mostrado que vale la pena soñar en grande, que cuesta el mismo esfuerzo que soñar en pequeño.</div>
</div>
<div class="valoracion-notas" style="border-bottom-color: rgb(238, 238, 238); border-bottom-style: solid; border-bottom-width: 1px; border-top-color: rgb(238, 238, 238); border-top-style: solid; border-top-width: 2px; clear: left; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; height: 16px; letter-spacing: 1px; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 5px; padding-bottom: 5px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; padding-top: 5px; text-align: justify;">
<div style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px;">
<div style="display: block; float: right; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px;">
</div>
</div>
</div>
<div id="normativa" style="background-attachment: initial; background-clip: initial; background-color: whitesmoke; background-origin: initial; background-position: 10px 7px; border-bottom-color: rgb(215, 215, 215); border-bottom-style: solid; border-bottom-width: 1px; border-top-color: rgb(215, 215, 215); border-top-style: solid; border-top-width: 1px; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; padding-bottom: 15px; padding-left: 75px; padding-right: 15px; padding-top: 15px; text-align: justify;">
</div>
HUGO VILLARROEL ABREGOhttp://www.blogger.com/profile/17961999961329849351noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-14905539.post-78295578886847524802012-09-11T13:20:00.003-06:002012-09-11T13:20:51.689-06:00<br />
<h1 style="color: #006699; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font: normal normal normal 250%/120% Neuton, Georgia, 'Times New Roman', Times, serif; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: center;">
<b><span class="Apple-style-span" style="font-size: large;"><br /></span></b></h1>
<h1 style="color: #006699; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font: normal normal normal 250%/120% Neuton, Georgia, 'Times New Roman', Times, serif; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: center;">
<b><span class="Apple-style-span" style="font-size: large;">Prohibido morir.</span></b></h1>
<div style="text-align: center;">
<b><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></b></div>
<div style="text-align: center;">
<b><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Amigos: este es mi último editorial, publicado en La Prensa Gráfica.</span></b></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjgztkmHpxzsOIsUhOtW064-73JhTDacXo-sdpGmnSy4g6e7G5wsonqXJExt022Bs4gHM0tIloq7BXO5JEqy4y_28egx881itPwCQN1Hhh1Mu6ApJgibPJBunyToYyyT3W1Q1wiXw/s1600/Typing+madly+at+night.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjgztkmHpxzsOIsUhOtW064-73JhTDacXo-sdpGmnSy4g6e7G5wsonqXJExt022Bs4gHM0tIloq7BXO5JEqy4y_28egx881itPwCQN1Hhh1Mu6ApJgibPJBunyToYyyT3W1Q1wiXw/s320/Typing+madly+at+night.JPG" width="320" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
<b><span class="Apple-style-span" style="font-size: large;"><br /></span></b></div>
<h2 style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 13px; font: normal normal normal 115%/120% Arial, Helvetica, sans-serif; line-height: 15px; margin-bottom: 10px;">
<div style="color: #000033; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 17px; font-weight: normal; font: normal normal normal 115%/125% Arial, Helvetica, sans-serif; line-height: 21px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
Historia de Ripley: el alcalde de una pequeña ciudad, ante la falta de cementerio local, resolvió el problema proclamando un edicto: “Prohibido morir”. Más allá del absurdo, el intelecto encontraría digno meditar sobre nuestras actitudes ante la muerte, tema que, para la gente de fe, se resolvería invocando la inmortalidad del alma y que, para los incrédulos, debería ser indiferente.</div>
</h2>
<span class="Apple-style-span" style="color: #3399cc; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 13px; line-height: 15px;">Escrito por Hugo Villarroel Ábrego </span><span class="Apple-style-span" style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 13px; line-height: 15px;"><span class="mail" style="color: #cc6600; line-height: 29px; margin-bottom: 25px; margin-left: 15px; margin-right: 0px; margin-top: 10px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 10px;">Sábado, 08 septiembre 2012 00:00</span></span><div class="valoracion-notas" style="border-bottom-color: rgb(238, 238, 238); border-bottom-style: solid; border-bottom-width: 1px; border-top-color: rgb(238, 238, 238); border-top-style: solid; border-top-width: 2px; clear: left; color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 13px; font-weight: normal; height: 16px; letter-spacing: 1px; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 5px; padding-bottom: 5px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; padding-top: 5px;">
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 13px; font-weight: normal; line-height: 15px;">
<div id="socialnetwork" style="color: #666666; display: block; float: right; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 13px; font-weight: normal; line-height: 15px;">
</div>
</div>
</div>
<div style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 13px; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
No pondré mi acento en debates de esa índole y explicaré mi verdadera inquietud: ¿Llamamos “vida” a la sucesión de nacer, crecer, reproducirse y envejecer? ¿Llamamos “vivir” al microescenario donde exhibimos penas y glorias domésticas, luchando por satisfacer apetitos? ¿Es “vivir” el ciclo de sueño, vigilia, trabajo y ocio? Sin importar la faena, oficio o profesión, ¿nos basta esta cuota de rituales, pasatiempos y labores para sentirnos realizados? ¿Hay un espacio para soñar, para trascender esta rutina demoledora?</div>
<div style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 13px; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
Son preguntas retóricas, pretexto para alzar la voz y decir: “¡Prohibido morir!” Pero no hablamos ya de muerte física, sino de muerte espiritual y emocional, el estado zombi-vegetativo del que, abandonando sueños, valores e ilusiones, se rinde y degrada al conformarse con ser simple pieza de recambio de la gran máquina, la sociedad autocomplaciente que nos aturde y embelesa con sus subproductos masificados. Nos quejamos de un sistema deshumanizado, pero somos indiferentes a las luchas de aquellos que dan la espalda a la mediocridad y el conformismo. La respuesta de la gente ante estos “guerreros emocionales” (como los llama Claude Steiner) pasa desde testigos apáticos hasta franca hostilidad. Cuando la gente es honesta y fiel a sus ideales y principios, cuando la buena fe es su manual de vida, se expone a grandes peligros.</div>
<div style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 13px; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
El maestro que desafía al sistema si se le pide enseñar propaganda y no ciencia, el médico que desobedece una orden si sabe que con ello vulnera los valores de su paciente, el fiscal que sabiendo inocente a un indiciado reclama el cese de la persecución, el funcionario público que arriesga el puesto antes que corromperse con dinero ajeno, todos son buenos ejemplos de héroes cotidianos que se exponen a ser maltratados y purgados.</div>
<div style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 13px; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
Lo había dicho Cristo: “Miren que los envío como ovejas en medio de lobos” (Mateo, 10:16). Muchos agachan la cabeza y desvían la mirada cuando el justo es perseguido y ridiculizado... Vemos en acción “mecanismos de control social”, maneras de mantener a todos los pájaros dentro de la jaula. Cito a Roger Waters: “No te dejarán volar, quizás te dejen cantar”. Y cantando se va la vida, al ritmo que otros imponen, sin romper moldes, siguiendo argumentos ajenos, renegando de una libertad que no tenemos coraje para conquistar. Sin fe, sin sueños, el cadáver ambulante se desmorona poco a poco, ante la mirada impasible del mundo.</div>
<div style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 13px; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
Pero nunca es tarde. Saquemos lustre a la vieja armadura. Aprendiendo a disentir recuperemos el don del pensamiento libre, reconquistemos el derecho a la autonomía. Dediquémonos con empeño y disciplina a las faenas, haciendo del trabajo una obra de arte, que nuestra hoja de vida sea como un museo de Bellas Artes, abierto al mundo. Empuñando el machete, el martillo de la justicia, la escoba, la pluma, el bisturí o luchando con manos desnudas, no importa lo encumbrado o humilde del campo de batalla, la lucha por vivir tiene como objetivo el Paraíso en la Tierra. Pero es un Paraíso en construcción, que demanda devoción a la excelencia, sin conformismos. Trabajemos, pues, de manera excelente; hagamos aportes significativos, enseñemos a nuestros hijos a no claudicar.</div>
<div style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 13px; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
Retomemos el mandato: “¡Prohibido morir!”. Hay demasiado en juego: nuestra dignidad de buenos salvadoreños y la felicidad, aquí, ahora y siempre.</div>
<div class="valoracion-notas" style="border-bottom-color: rgb(238, 238, 238); border-bottom-style: solid; border-bottom-width: 1px; border-top-color: rgb(238, 238, 238); border-top-style: solid; border-top-width: 2px; clear: left; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 13px; font-weight: normal; height: 16px; letter-spacing: 1px; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 5px; padding-bottom: 5px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; padding-top: 5px; text-align: justify;">
<div style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 13px; font-weight: normal; line-height: 15px;">
<div style="display: block; float: right; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 13px; font-weight: normal; line-height: 15px;">
</div>
</div>
</div>
<div id="normativa" style="background-attachment: initial; background-clip: initial; background-color: whitesmoke; background-image: url(http://www.laprensagrafica.com//images/especiales/icono_comentarios.png); background-origin: initial; background-position: 10px 7px; background-repeat: no-repeat no-repeat; border-bottom-color: rgb(215, 215, 215); border-bottom-style: solid; border-bottom-width: 1px; border-top-color: rgb(215, 215, 215); border-top-style: solid; border-top-width: 1px; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 13px; font-weight: normal; line-height: 15px; padding-bottom: 15px; padding-left: 75px; padding-right: 15px; padding-top: 15px; text-align: justify;">
</div>
HUGO VILLARROEL ABREGOhttp://www.blogger.com/profile/17961999961329849351noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-14905539.post-53930385828420951752012-07-22T14:44:00.002-06:002012-07-22T18:18:22.044-06:00<br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Amigos: Aquí publico mi más reciente editorial, "Para gobernar a los hombres". Espero sea de su agrado y motivo de reflexión. Julio 22, 2012.</span><br />
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
<a href="http://www.laprensagrafica.com/opinion/editorial/274212-para-gobernar-a-los-hombres.html">http://www.laprensagrafica.com/opinion/editorial/274212-para-gobernar-a-los-hombres.html</a><br />
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
<div style="margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi1TYfruqpJnrKwgYHVDWiUrZO8GbfUgw6QEV0TmRxtVKG4U_1tL7Wh9q2mLU0Xsb4O-AznPbmFTdVRSvtMWMUUcAlC5ooHUk0qZKUA5rw7MH14aniYbwA_HHgndkEWIsUxy4JXlA/s1600/BERNARD+FRIZE+-+OMA+-+CENTRO+POMPIDOU.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="249" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi1TYfruqpJnrKwgYHVDWiUrZO8GbfUgw6QEV0TmRxtVKG4U_1tL7Wh9q2mLU0Xsb4O-AznPbmFTdVRSvtMWMUUcAlC5ooHUk0qZKUA5rw7MH14aniYbwA_HHgndkEWIsUxy4JXlA/s320/BERNARD+FRIZE+-+OMA+-+CENTRO+POMPIDOU.JPG" width="320" /></a></div>
</div>
<div style="text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: x-small;">BERNARD FRIZE - OMA - CENTRO POMPIDOU - PARÍS</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div>
<h1 style="color: #006699; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font: normal normal normal 250%/120% Neuton, Georgia, 'Times New Roman', Times, serif; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;">
<span class="Apple-style-span" style="font-size: large;">Para gobernar a los hombres</span></h1>
<h2 style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font: normal normal normal 115%/120% Arial, Helvetica, sans-serif; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="color: red; font-size: small;">“Para gobernar a los hombres y servir al Cielo, no hay nada mejor que la moderación... Por la moderación se puede ser generoso. Por la humildad se puede guiar al mundo.”</span></h2>
<br />
<br />
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
Hace veinticuatro siglos el mítico Lao-Tsé amonestaba así a los monarcas. Más aún, afirmó, en el Tao Te Ching: “Si yo fuera rey de un pequeño reino... haría que el pueblo estuviera dispuesto a dar su vida, defendiendo sushogares, antes que pensaran emigrar... Hallarían tranquilas sus moradas. Disfrutarían sus costumbres”.</div>
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
En nuestro pequeño reino, <b>El Salvador</b>, la indefensión, el deseo de evadirnos, la zozobra cotidiana y el rechazo a las tradiciones propias en busca de lo foráneo parecen ser sellos distintivos de un pueblo que renuncia a metas trascendentes para meramente sobrevivir.</div>
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
Sigo citando: “El Sabio, para ser señor de su pueblo debe colocarse por debajo de él... Lo guía sin que sufra... Si el pueblo es difícil de gobernar, es porque sus gobernantes se entrometen en sus vidas... Les han hecho la vida muy dura”. Suena profético y solo nos queda el consuelo bobo de no ser los únicos que sufren los desaciertos de los líderes por nosotros mismos elegidos para conducir ¿o descarrilar? a la Patria del trayecto soñado de “conquistarse un feliz porvenir”.</div>
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
Amor, moderación y humildad. ¿Mucho pedir en política? Artistas de la confrontación, legisladores y jurisconsultos se devoran unos a otros de frente a la opinión pública, como pirañas en una pecera. No importa quién tenga los mejores argumentos o se acerque más a la razón. Lo que asusta es el instinto depredador, la celebración de los excesos, el desafecto por el orden institucional. Para ellos consenso es la opinión del más fuerte. Compromiso implicaría renunciación de todos y satisfacción para ninguno.</div>
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
Si hubiese un mínimo respeto por el colega, por el rival ideológico o político, con ese ingrediente único se podría pensar en cooperación, entiéndase, en operar o trabajar juntos, por el bien de un país que asiste atónito al espectáculo de la batalla campal (de intereses, no de Poderes) que pone en entredicho nuestra verdadera capacidad de autogobierno.</div>
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
Al cooperar y encontrar soluciones habrá que conciliar. Pero conciliar no es un apretón de manos hipócrita: exige reconocer que no todos quedan ilesos, que hay necesidad de restaurar autoestima y limar asperezas.</div>
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
Este artículo es un llamado a la cordura. Sin acusar a ninguno ni tomar partido por nadie, busca invocar la moderación de todos. Si aman a <b>El Salvador</b> hagan cónclave (literalmente encerrarse bajo llave) y no asomen la cara ante el pueblo sin haber llegado a un acuerdo. No solo se trata de evitar el ridículo ante el mundo: lo urgente es volver a un orden que permita funcionar al país, que sirva para demostrar que nuestra traída y llevada “independencia” no es tan solo palabrería hueca.</div>
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
Definidos los elementos en que hay postura unánime, un mínimo común denominador, se deben enumerar los problemas con sencillez para describir, calificar y ventilar las diferencias de opinión y encontrar salidas legales y dignas para todos. Constitución en mano deberá haber concesiones mutuas y renunciaciones más o menos reñidas con las agendas políticas privadas. No menos importante: Resuelta la crisis, ¿cómo prevenir que un conflicto similar vuelva a ocurrir? Pilotos de la nave del Estado: piensen en que su misión es llevar a buen puerto a este pueblo que tanta fe puso en ustedes a la hora de emitir sufragio. Gobiernen bien, gánense el cielo, nuestra gratitud y el respeto del mundo. No es tonto, ingenuo ni improcedente pedir que prevalezcan en sus actos el amor a la Patria, la humildad y la moderación.</div>
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
<br /></div>
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Muchas gracias por su atención a este blog.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Hugo Villarroel.</span></div>HUGO VILLARROEL ABREGOhttp://www.blogger.com/profile/17961999961329849351noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-14905539.post-1200471696836865922012-07-15T23:12:00.000-06:002012-07-15T23:17:15.014-06:00<a href="http://www.laprensagrafica.com/opinion/editorial/273065-los-variados-rostros-de-la-cultura.html"></a><br />
<div>
<br /></div>
<div>
<br /></div>
<div>
<div align="center" style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm; text-align: center;">
<b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><span style="color: black; font-size: 16pt;">Los variados rostros de la cultura: Un llamado a la
tolerancia.<o:p></o:p></span></b></div>
<div align="center" style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm; text-align: center;">
<b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><span style="color: black; font-size: 16pt;"><br /></span></b></div>
<div align="center" style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm; text-align: center;">
<b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><span style="color: black;">Editorial publicado en Opinión de La Prensa Gráfica el día Domingo 15 de julio del año 2012</span></b></div>
<div align="center" style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm; text-align: center;">
<b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><span style="color: black;"><a href="http://www.laprensagrafica.com/opinion/editorial/273065-los-variados-rostros-de-la-cultura.html">http://www.laprensagrafica.com/opinion/editorial/273065-los-variados-rostros-de-la-cultura.html</a></span></b></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm; text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm; text-align: justify;">
<span style="color: black; font-size: 13.5pt;"><o:p><br /></o:p></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjSjbk8IyxmkCQdJFb6ygBZd6vQa6jf7ked_M-V-J_m36I04PBkO9x7Ok_Tq3jj8gPfXs7yhEC1AOI6pPnHeQraVJ1UJMltFtIsec5hHGsyQ79X_xtHT-W-CS8oJXv1cv_TJhxIOQ/s1600/P1070640.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="180" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjSjbk8IyxmkCQdJFb6ygBZd6vQa6jf7ked_M-V-J_m36I04PBkO9x7Ok_Tq3jj8gPfXs7yhEC1AOI6pPnHeQraVJ1UJMltFtIsec5hHGsyQ79X_xtHT-W-CS8oJXv1cv_TJhxIOQ/s320/P1070640.JPG" width="320" /></a></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm; text-align: justify;">
<span style="color: black; font-size: 13.5pt;"><o:p><br /></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm; text-align: justify;">
<span style="color: black; font-size: 13.5pt;"><o:p><br /></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm; text-align: justify;">
<span style="color: black; font-size: 13.5pt;"><o:p><br /></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm; text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span">Museo de Arte Moderno, Münich. Un crítico
escruta un óleo de Bacon sin disimular "disgusto" ante "una
grotesca pero colorida muestra de sadismo"… Disfruta disentir de otros
expertos. En Multiplaza, San Salvador, la gente se apiña frente al desfile de
modas de una boutique. Situaciones y escenarios diferentes, pero todos comentan
y critican, nadie es indiferente al goce estético que siente o deja de sentir.
Disfrutan, evitan el aburrimiento, practican escapismo emocional. El tiempo
transcurre y dirán: "¡Qué bien la hemos pasado!". El crítico cenará baguette
de salmón y té de Assam. Los asistentes al desfile despacharán hamburguesas y
gaseosas.</span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm; text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm; text-align: justify;">
<span style="color: black;">Todo es cultura, expectativas, aspiraciones
y conductas. La aprendimos durante los "años plásticos" de la
infancia y aprueba o condena manifestaciones según las llamadas "buenas
costumbres". Así, llorar en las bodas es visto con simpatía, pero si
alguien lanza una carcajada será reprendido (a menos que su líder espiritual lo
haga primero). En Suabia quiebran platos al casarse, algo que sería excéntrico
en Centro América. Aparte geografía o grupos étnicos, dichas “buenas
costumbres”, cuya observancia discrimina entre “cultos” e “incultos”, son dictadas
por algo que la conciencia colectiva respeta: la Tradición. Las cosas siempre
se han hecho de cierta manera, algo enquistado en la psique en una época
prelógica: el niño obedece sin razonar, no pregunta por qué hasta alcanzar
cierta edad y, llegado ese momento, la respuesta a menudo es poco ilustrativa:
"porque sí", "porque no", "siempre ha sido así".
La tradición, forma visible del patrón cultural está basada en "valores"
(prejuicios más o menos sagrados) y es dictada por los mayores, que se suponen más
sabios y competentes; se hereda igual que se legan los genes, es vinculante, básica
para la cohesión y supervivencia de familia, sociedad y nación, aún si está
reñida con una visión científica del mundo. Patrón y tradición facilitan el accionar
individual porque simplifican la tarea de definir "correcto", e "incorrecto".
Desobedecer lleva a censura que genera, a su vez, miedo y culpa, motores de obediencia
y sumisión a la autoridad.<o:p></o:p></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm; text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm; text-align: justify;">
<span style="color: black;">Es fácil caer en tentación de juzgar y
comparar patrones culturales, propios y ajenos. Algunos desprecian su herencia
de ensueño, legada por nuestros antepasados mesoamericanos y claman por transculturación
a buenas o malas. Otros añoran un bucólico retorno a los orígenes
precolombinos. Al comparar irrespetamos valores subyacentes a rituales y
comportamientos de nuestros hermanos, de modo trivial —sonrisa desdeñosa— hasta
trágico, como lo recuerdan los campos de exterminio. Pensemos en los europeos,
en la antigüedad de sus instituciones, su tecnología, riqueza, talento artístico...
En contraste, los indígenas amazónicos yanomame subsisten en primitivo pero armónico
modo con el ecosistema. Desconocen la rueda, su arte utilitario carece de
pretensiones, su sistema numérico tiene tres cifras: "uno",
"dos" y "más de dos". Practican la endogamia (como las
casas reales europeas) y comercian con indígenas vecinos con más eficiencia que
la Comunidad Económica. Su frugalidad, sencillez y solidaridad destacan frente
a la glotonería, complejidad y competitividad de sus congéneres "civilizados".
¿Deberíamos menospreciar o exaltar a los yanomame? Ni una cosa ni otra, no
invocamos el mito del “buen salvaje”: abogamos por tolerancia y respeto mutuo,
aunque se nos distinga por pertenecer a distintas etnias, por estar o no
influidos por diferentes credos o corrientes de cultura o contracultura. Amantes
del arte clásico o diletantes del pop, busquemos un nicho para todos, en donde
podamos morar sin sentirnos rebajados o enaltecidos. Esta es la más sofisticada
manera de ser cultos en la aldea global, más allá de las a veces insalvables
diferencias, ya sea admirando arte en un museo o frente a la pasarela, en un
centro comercial. </span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm; text-align: justify;">
<span style="color: black;"><br /></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm; text-align: justify;">
<span style="color: black;">Gracias amigos, por estar pendientes de mi trabajo.</span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm; text-align: justify;">
<span style="color: black;"><br /></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin: 0cm; text-align: justify;">
<span style="color: black;">Hugo Villarroel A. <span class="Apple-style-span" style="font-size: medium;"><o:p></o:p></span></span></div>
</div>HUGO VILLARROEL ABREGOhttp://www.blogger.com/profile/17961999961329849351noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-14905539.post-47779377003054289922012-06-09T11:04:00.001-06:002012-06-09T13:53:04.571-06:00<br />
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<b><span style="font-family: Arial, sans-serif; font-size: 14pt; line-height: 21px;">¿Preparados para perdonar?</span></b></div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><span style="font-family: Arial, sans-serif; line-height: 115%;"><span class="Apple-style-span" style="color: red;"><br /></span></span></b><br />
<span class="Apple-style-span" style="color: red; font-family: Arial, sans-serif;"><span class="Apple-style-span" style="line-height: 18px;"><b><br /></b></span></span><br />
<b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><span style="font-family: Arial, sans-serif; line-height: 115%;"><span class="Apple-style-span" style="color: red;">Editorial publicado en la Sección Opinión, página 25 de la edición del día sábado 9 de </span></span></b></div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><span style="font-family: Arial, sans-serif; line-height: 115%;"><span class="Apple-style-span" style="color: red;">junio del año 2012.</span></span></b></div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><span style="font-family: Arial, sans-serif; line-height: 115%;"><span class="Apple-style-span" style="color: red;"><br /></span></span></b></div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="color: blue; font-family: Arial, sans-serif;"><span class="Apple-style-span" style="line-height: 18px;"><b>http://www.laprensagrafica.com/opinion/editorial/267203-ipreparados-para-perdonar.html</b></span></span></div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, sans-serif;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: 19px; line-height: 21px;"><b><br /></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi2RpqN36K3Eh-FwflSl72n1nJBMcTD8w4YtLNv_r6tnOLVziBSLR16l9IOk1jZKV9Rp2_qePfL337vkNGjqD-eCYls0SE4xCRsvEfMcXPtmrN4BEi_n-FawPOZEuB1Im1RC7d-7Q/s1600/Torso+y+reloj.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi2RpqN36K3Eh-FwflSl72n1nJBMcTD8w4YtLNv_r6tnOLVziBSLR16l9IOk1jZKV9Rp2_qePfL337vkNGjqD-eCYls0SE4xCRsvEfMcXPtmrN4BEi_n-FawPOZEuB1Im1RC7d-7Q/s320/Torso+y+reloj.jpg" width="167" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<span style="font-family: Arial, sans-serif; font-size: 14pt; line-height: 115%;"><o:p><br /></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, sans-serif; font-size: 14pt; line-height: 115%;"><o:p><br /></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, sans-serif; font-size: 14pt; line-height: 115%;"><o:p><br /></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, sans-serif; line-height: 115%;">Castigar es humano, perdonar
es divino, argumento suficiente para frenar, aunque de modo efímero, el ímpetu
asesino de Amon Goeth, el nazi que hacía de la matanza al azar en los campos de
concentración un deporte cotidiano. Si perdonar fuera fácil, aún las ofensas
mínimas, poner la otra mejilla y orar por los que nos persiguen y lastiman serían
actos automáticos y no pura palabrería. Los límites del ego hacen durísima la
faena y la cultura del desquite impregna nuestro vivir desde la infancia. En
cambio, ofreciendo bien por mal, se da la alternativa de conversión al que ofende
y, aun dejando de lado a la religión, bastaría con apelar al mutuo respeto y
tolerancia para la resolución de todo conflicto. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, sans-serif; line-height: 115%;"><br /></span><br />
<span style="font-family: Arial, sans-serif; line-height: 115%;">La dinámica del perdón es
compleja. Si los salvadoreños hubiésemos perdonado no seguiríamos de duelo, lamiendo
nuestras heridas de guerra en público. Persisten dolor y rencor porque fuimos
ingenuos al creer que era suficiente un “perdón y olvido” por decreto. Las
partes en contienda han fracasado en mostrar verdadera contrición por los
graves daños que se causaron entre sí y a las inocentes víctimas del fuego
cruzado. No bastó la tregua militar, más el resultado de la fatiga y la falta
de recursos para seguir combatiendo que de una verdadera voluntad de conciliar.
Hoy, el reto es hacer honor a nuestra realidad histórica: cada quien reconociendo
sus faltas, pidiendo perdón con sincera humildad y, en la medida de lo
humanamente posible, reparando los daños, con promesa firme de no repetir la
injuria. Pero conceder el perdón no implica impunidad sino más bien un cese de
hostilidad o de emociones negativas, es dar la espalda al odio y al rencor en
aras de dar oportunidad a una resolución justa y apegada a derecho de todos los
conflictos de nuestro pasado. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, sans-serif; line-height: 115%;"><br /></span><br />
<span style="font-family: Arial, sans-serif; line-height: 115%;">¿Quién será el árbitro que garantizará
la reparación de afrentas, la rehabilitación de ofendidos y la restauración de
la autoestima de todas las partes? Los Acuerdos de Paz fueron la base
conceptual para tal proceso, pero no más que una plataforma de lanzamiento: Dos
décadas después, aún sin armas en las manos, muchos salvadoreños siguen en pie
de guerra, víctimas de estrés postraumático, enfrentados entre sí y matándose a
recuerdos, en duelo interminable. Nadie muestra clemencia ni se quiere recordar
que tampoco es apropiado o digno hacer escarnio de aquellos que estén
dispuestos a aceptar culpa y pedir perdón: esto sería venganza… Y la venganza
bloquea el acceso a la empatía y la compasión. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, sans-serif; line-height: 115%;"><br /></span><br />
<span style="font-family: Arial, sans-serif; line-height: 115%;">Nos falta recorrer un largo
trecho para estar a la altura de estas expectativas, pero no somos los únicos
que han pasado por transiciones penosas hacia la paz, desde la discordia hacia
la reconciliación. Contamos, para no desmayar en el camino, con el ejemplo
edificante de pueblos que ahora prosperan en democracia, de naciones
reunificadas, de holocaustos irrepetibles gracias a la expansión de la
conciencia histórica de los seres humanos.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, sans-serif; line-height: 115%;"><br /></span><br />
<span style="font-family: Arial, sans-serif; line-height: 115%;">Somos falibles y capaces de
lastimar. El perdón es expresión máxima de humanidad y todos esperamos ser
dignos de él, por lo que la reciprocidad es fundamental para convivir dignamente.
Hasta el infame Amon Goeth pudo “perdonar” las vidas de un puñado de
prisioneros inocentes. Hoy, hay esperanza que en las mentes y corazones de
nuestros jóvenes salvadoreños haya espacio y talante propicios para un futuro
de fraternidad y tolerancia, es vital educar sus emociones. Demos el primer
paso, aunque duela, aunque la pérdida haya sido devastadora. Así ganaremos el
respeto de todos, aún de aquellos que se hacen llamar nuestros rivales… o enemigos. </span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, sans-serif; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, sans-serif; line-height: 115%;">Espero sus comentarios, amigos.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, sans-serif; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, sans-serif; line-height: 115%;">Hugo Villarroel Ábrego. <span class="Apple-style-span" style="font-size: medium;"><o:p></o:p></span></span></div>HUGO VILLARROEL ABREGOhttp://www.blogger.com/profile/17961999961329849351noreply@blogger.com0Carretera Panamericana, El Salvador13.752724664396988 -89.0332031259.8076156643969874 -94.086914124999993 17.697833664396988 -83.979492125000007tag:blogger.com,1999:blog-14905539.post-7087384440855237762012-04-21T15:23:00.002-06:002012-04-21T15:35:00.049-06:00<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="color: red;"><b>LENGUAS COMO CUCHILLOS</b></span></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="color: blue;"><b>Editorial publicado en Opinión de La Prensa Gráfica, jueves 19 de abril, 2012.</b></span></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
<a href="http://www.facebook.com/l.php?u=http%3A%2F%2Fwww.laprensagrafica.com%2Fopinion%2Feditorial%2F258720-lenguas-como-cuchillos.html&h=AAQHuQPMk">http://www.laprensagrafica.com/opinion/editorial/258720-lenguas-como-cuchillos.html</a></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiBXzr5tHpcL_PWFemh-wFiW1gxzZSBijPGqwFT-YlKGuC04QX3zCdk_0KP1lO7ZA85CuE2B-aRDZMxuYSCBLH8_hBxQfxAuE13bIKVfPCWn64LLVmNHB6DoWgNhI5ON-asqxcgVQ/s1600/P1100230.TIF" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="154" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiBXzr5tHpcL_PWFemh-wFiW1gxzZSBijPGqwFT-YlKGuC04QX3zCdk_0KP1lO7ZA85CuE2B-aRDZMxuYSCBLH8_hBxQfxAuE13bIKVfPCWn64LLVmNHB6DoWgNhI5ON-asqxcgVQ/s320/P1100230.TIF" width="320" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
Gracias, amigos, por su interés en mi trabajo.</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<br />
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 13px; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
“La lengua afable es un árbol de vida, la lengua perversa hiere en lo más vivo (Proverbios: capítulo 15, v. 4)”. También se ha dicho que la pluma es más poderosa que la espada y la idea central es el poder de la palabra. Cito a Stephen Hawking: “Algo ocurrió que desencadenó el poder de nuestra imaginación: aprendimos a hablar”. Ya como ondas sonoras o signos impresos, las palabras evocan reacciones en el cerebro de manera tan eficiente que cualquier escenario, aun absurdo, puede reproducirse con exactitud en nuestras mentes.</div>
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 13px; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
La conciencia, don divino, surge del lenguaje. Pero el lenguaje, como cualquier otro recurso, pronto se convirtió en arma sofisticada. Vehículo de cultura o herramienta de seducción, coacción u ofensa, la palabra ejerce efectos poderosos sobre el cerebro: creemos lo que nos han dicho que somos. Todo por una necesidad tan importante como el agua, aire o el alimento: el hambre de estímulo. Sin estímulo todo organismo se agota y perece, como ocurre con niños privados de atención y afecto. Algún estímulo es mejor que ninguno y por eso el aislamiento, silencio e indiferencia influyen tanto sobre la conducta. Si el lenguaje es rudo u ofensivo, degrada los espíritus.</div>
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 13px; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
Pero palabras elegantes y cultas pueden ser igual de dañinas cuando despiertan o canalizan reacciones peligrosas para la integridad propia o del prójimo y esto lo saben todos los demagogos y muchas figuras públicas.</div>
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 13px; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
En un país tan lastimado y en carne viva como El Salvador, urgidos como estamos de una sanación definitiva, duele oír voces airadas, leer escritos coléricos, acusaciones interminables, sin cuartel: El campo de batalla se extiende desde el hogar más humilde hasta la asamblea de los padres de la Patria, la sociedad entera. Somos testigos y cómplices de estos duelos verbales, de lenguas como cuchillos, de adjetivos estériles. Sí, estériles, porque no se puede montar un diálogo fértil si nos ciega la furia, aun cuando la furia esté justificada, aun cuando nos asista la razón.</div>
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 13px; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
Cómo y cuándo expresarse es derecho inalienable: las mismas letras del alfabeto y signos de puntuación se usan para escribir los Evangelios, las novelas del marqués de Sade, el Mein Kampf de Hitler o la poesía de Borges y no es lícito coartar la palabra a ángeles o demonios. Hay también derecho a que cada uno se sintonice con lo que quiere leer o escuchar, lo que le gusta o provoca placer, constructivo o destructivo: eso permite que, con fines a veces inconfesables, nuestras mentes sean moldeadas o manipuladas desde temprana edad, tanto por lo que se dice como por lo que se calla.</div>
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 13px; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
Es decisión soberana e individual dar uso sabio o necio al don de la palabra. Podemos educar, enseñar belleza, transmitir afecto, informar la verdad y estrechar lazos. O usar estas mismas palabras para lastimar, esparcir mentiras y rumores infundados, intrigar, sembrar prejuicios e intolerancia.</div>
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 13px; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
Antes de hacer crítica pública o privada valdría la pena hacer el muy conocido escrutinio del “triple filtro”: ¿Existe una base real o lógica en nuestras palabras? ¿Lo que vamos a decir tiene intenciones bondadosas o constructivas? ¿Servirán mis palabras para algo o para alguien? Lo que entra por la boca no hace impura a la persona, pero sí la mancha lo que sale de ella, son palabras de Cristo. ¿Queremos que nuestras lenguas desborden verdad, bondad y utilidad? ¿O queremos que sean como cuchillos, armas cortantes diseñadas para la desgracia propia y ajena?</div>
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 13px; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;">
</div>
<div class="valoracion-notas" style="border-bottom-color: rgb(238, 238, 238); border-bottom-style: solid; border-bottom-width: 1px; border-top-color: rgb(238, 238, 238); border-top-style: solid; border-top-width: 2px; clear: left; color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 13px; font-weight: normal; height: 16px; letter-spacing: 1px; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 5px; padding-bottom: 5px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; padding-top: 5px; text-align: justify;">
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 13px; font-weight: normal; line-height: 15px;">
<div style="color: #666666; display: block; float: right; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 13px; font-weight: normal; line-height: 15px;">
</div>
</div>
</div>
<div id="normativa" style="background-attachment: initial; background-clip: initial; background-color: whitesmoke; background-image: url(http://www.laprensagrafica.com//images/especiales/icono_comentarios.png); background-origin: initial; background-position: 10px 7px; background-repeat: no-repeat no-repeat; border-bottom-color: rgb(215, 215, 215); border-bottom-style: solid; border-bottom-width: 1px; border-top-color: rgb(215, 215, 215); border-top-style: solid; border-top-width: 1px; color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 13px; font-weight: normal; line-height: 15px; padding-bottom: 15px; padding-left: 75px; padding-right: 15px; padding-top: 15px; text-align: justify;">
</div>HUGO VILLARROEL ABREGOhttp://www.blogger.com/profile/17961999961329849351noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-14905539.post-21669338599364591342012-03-13T09:02:00.002-06:002012-03-13T23:34:02.976-06:00<br />
<h1 style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font: normal normal normal 250%/120% Georgia, 'Times New Roman', Times, serif; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: center;">
<b><span class="Apple-style-span" style="background-color: white; color: red; font-size: large;">¿Qué significa ser salvadoreño?</span></b></h1>
<div>
<b><span class="Apple-style-span" style="background-color: white; color: red; font-size: large;"><br /></span></b></div>
<div style="text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="background-color: white; color: blue;"><b>Editorial publicado en Opinión, La Prensa Gráfica, edición del día 13 de marzo del año 2012.</b></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span class="Apple-style-span" style="background-color: white; color: blue;"><b><br /></b></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="background-color: white; color: #444444;"><b>Muchos se han enojado, por eso, creo, hay algunas posibilidades a considerar:</b></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="background-color: white; color: #444444;"><b><br /></b></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="background-color: white; color: #444444;"><b>1. El tema es sensible para el lector promedio;</b></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="background-color: white; color: #444444;"><b>2. Hay un importante déficit de lectura comprensiva;</b></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="background-color: white; color: #444444;"><b>3. Somos intolerantes y explosivos para expresar esa intolerancia;</b></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="background-color: white; color: #444444;"><b>4. Escribo complicado (en serio, por si no lo habían notado, ja, ja);</b></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="background-color: white; color: #444444;"><b>5. Todas las anteriores.</b></span></div>
<div style="text-align: justify;">
</div>
<h2 style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font: normal normal normal 115%/120% Arial, Helvetica, sans-serif; line-height: 15px; margin-bottom: 10px;">
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjXe2z7-G80hRNsAoTg673pj5DTtwWya7XkUUg0MbgaGraBsbTmq2Dw0Qb4zObcM2ekKDaaNTc3JIAanmHbtUQdITWHgIE8oqaQ2tUimRZDtcR3KjXlRryfetkv94C1clCxEibNIQ/s1600/4711805952_7eb88c5cfc_z.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="270" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjXe2z7-G80hRNsAoTg673pj5DTtwWya7XkUUg0MbgaGraBsbTmq2Dw0Qb4zObcM2ekKDaaNTc3JIAanmHbtUQdITWHgIE8oqaQ2tUimRZDtcR3KjXlRryfetkv94C1clCxEibNIQ/s320/4711805952_7eb88c5cfc_z.jpg" width="320" /></a></div>
<div style="color: #000033; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 17px; font-weight: normal; font: normal normal normal 115%/125% Arial, Helvetica, sans-serif; line-height: 21px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: -webkit-auto;">
<br /></div>
<div style="color: #000033; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; font: normal normal normal 115%/125% Arial, Helvetica, sans-serif; line-height: 21px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">¿Qué significa ser salvadoreño? ¿En qué dirección va nuestra patria? Me lo preguntaron y me declaré incompetente para responder. Eso irritó mi vocación científica y, en ejercicio mental mitad buceo sin escafandra, mitad harakiri, revisité ideas que se han ido sedimentando en mi memoria. Y en mi búsqueda del tesoro, montañas de guijarros aparte ¿propaganda, eslóganes?, he encontrado muy pocas pepitas de oro.</span></div>
<div style="color: #000033; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; font: normal normal normal 115%/125% Arial, Helvetica, sans-serif; line-height: 21px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;">
<span class="Apple-style-span" style="color: #666666; line-height: 15px;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: small;"></span></span></div>
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">La propaganda ha calado tan hondo en nuestra médula que al definirnos abundamos en lugares comunes. Como el doctor Frankenstein, queremos insuflar vida a un cadáver mitológico, a un zombi mal llamado “cultura nacional” y derivamos hacia el feísmo, una “acultura” vulgar con muchos padres probables pero ninguno responsable. Esta bastardía se injerta, indolora, en consumidores que devoran todo lo foráneo que alivie su pena existencial. Pero hay síntomas de alguna conciencia de nacionalidad: sonreímos, cómplices, al leer “Poema de amor” de Dalton. Lloramos con el Himno Nacional. Lejos del terruño extrañamos la “Patria Querida”. Pero también hacemos tumulto para las compras de “Black Friday” y cenamos pavo en Thanksgivings. Ejemplos aparte, existe una idea colectiva pero subliminal que nos apelmaza a regañadientes en esta parcela de 20,000 kilómetros cuadrados.</span></div>
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">Ortega y Gasset vio en el Estado un ente en metamorfosis continua, legitimado por un “plebiscito cotidiano”: El “sí” o el “no” de cada ser humano, cada día. “Sí” a respetar la ley, trabajar, pagar tributos, capear el temporal. Pero también el “no” de los apóstatas, de los evasores, de los migrantes que marchan en busca de pastos más verdes. Muchos, los más jóvenes y avispados se agitan, indecisos. El “País de la Sonrisa” es una colmena con más obreros que zánganos, pero donde decae la confianza en que la abeja reina merezca tanta entrega, sacrificio y laboriosidad. Se pueden soportar la carestía y las calamidades. “¡Sí se puede!” Pero no sin fe. Algunos sueños deberían volverse realidad para que la ilusión no fallezca y <b>El Salvador</b> necesita sobrevivir a su propio plebiscito cotidiano. El manifiesto diría: “Soy un ser humano. Estoy bien, Tú estás bien. Quiero ser libre y feliz junto al resto de la humanidad”. Parece redundante. Alguno diría “¡Aleluya!” Pero hasta eso hemos perdido, el reconocimiento de lo obvio. Ser persona implica solidaridad de especie, compromiso, un paquete de responsabilidades ¿qué tanto evadimos?, y no tan solo una lista de derechos que tanto demandamos.</span></div>
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">Quien dio nombre a nuestro país nos dio el mantra perfecto: “Amaos los unos a los otros”. Amar exige compasión: no lástima sino compartir pasiones, tolerancia y paciencia, un “Mínimum Espiritual”. Hablar de amor en tiempos de depredación del hombre por el hombre suena ingenuo pero justo. En los momentos preapocalípticos los profetas alzaban su voz, llamando al arrepentimiento. No quedan profetas de verdad, por desgracia: no es profesión rentable o estimada en tiempos de agoreros baratos y mercachifles del espíritu. Pero amor y fe dan luz a la sabiduría, esquiva para los muchos que esgrimen argumentos de cajón, pero amante fiel de los pocos que luchan contracorriente para develar la verdad histórica que todos merecemos saber.</span></div>
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">Pero estamos desmotivados, tristes. Lobotomizados, somos niños malcriados no aptos para el reparto de las cuotas de responsabilidad. Ignoramos el pasado y también fingimos que no vale la pena enamorarse del futuro.</span></div>
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">Sueño con un camino para recorrerlo sin miedo a tropezar con el escepticismo ajeno. Ya estoy haciendo equipaje. Quiero viajar con mis compatriotas, mis amigos. Y quiero, cuando vuelvan a preguntarme qué significa ser salvadoreño, tener una respuesta creíble y enaltecedora. Así sea.</span></div>
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-size: small;"><br /></span></div>
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">Saquen ustedes sus conclusiones.</span></div>
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-size: small;"><br /></span></div>
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">Con afecto y respeto</span></div>
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-size: small;"><br /></span></div>
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-size: small;">Su amigo, el autor.</span></div>
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;">
</div>
<div class="valoracion-notas" style="border-bottom-color: rgb(238, 238, 238); border-bottom-style: solid; border-bottom-width: 1px; border-top-color: rgb(238, 238, 238); border-top-style: solid; border-top-width: 2px; clear: left; color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; height: 16px; letter-spacing: 1px; line-height: 15px; margin-bottom: 10px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 5px; padding-bottom: 5px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; padding-top: 5px; text-align: justify;">
<div style="color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px;">
<div style="color: #666666; display: block; float: right; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px;">
</div>
</div>
</div>
<div id="normativa" style="background-attachment: initial; background-clip: initial; background-color: whitesmoke; background-origin: initial; background-position: 10px 7px; border-bottom-color: rgb(215, 215, 215); border-bottom-style: solid; border-bottom-width: 1px; border-top-color: rgb(215, 215, 215); border-top-style: solid; border-top-width: 1px; color: #666666; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal; line-height: 15px; padding-bottom: 15px; padding-left: 75px; padding-right: 15px; padding-top: 15px; text-align: justify;">
</div>
</h2>HUGO VILLARROEL ABREGOhttp://www.blogger.com/profile/17961999961329849351noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-14905539.post-77336161996453210552012-01-10T14:25:00.001-06:002012-03-13T23:34:48.807-06:00<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhLb-F6aESeI_eYFs-i_wQrHSzlk3URLMxtbzddm-SxJ9jx6lp3xouzHQwva4GyYDWTAvAHmi3YEcjIUxkCjK6gM2wJqtcTZnR6Rw6lZPbuDcBo62x6aUxmqHMkMlrmZxpvNjy2ew/s1600/Belleza+en+la+penumbra.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhLb-F6aESeI_eYFs-i_wQrHSzlk3URLMxtbzddm-SxJ9jx6lp3xouzHQwva4GyYDWTAvAHmi3YEcjIUxkCjK6gM2wJqtcTZnR6Rw6lZPbuDcBo62x6aUxmqHMkMlrmZxpvNjy2ew/s320/Belleza+en+la+penumbra.JPG" width="247" /></a></div>
<br />
<div style="text-align: justify;">
A menudo nos sentimos aislados, inmersos en un mundo sombrío y hostil. Ya hemos hablado de eso, ha sido parte de tantas tertulias y discusiones que parece no ser relevante añadir más prosa sobre el tema. Y también con imágenes, pausas, sonidos y toda forma plástica, los artistas ponen de manifiesto, una y otra vez, la presencia de esta soledad existencial que parece envolverlo todo. Es cíclico para algunos, permanente para otros, pero cada uno de nosotros, en algún momento, se ha sentido solo. Y tenemos miedo a la soledad. Tenemos miedo a una sensación de aislamiento que parece oprimir el pecho y desquiciar nuestras mentes. Pero como a menudo ocurre con nuestros temores, no siempre hay fundamento para sentirse mal y la mayor parte de veces,estamos solos porque así lo queremos. Veamos:</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
En primer lugar, estar físicamente solo es, por necesidad un estado transitorio, no permanente. <b>Es la generalización y exageración del perfil temporal de la realidad lo que nos hace sufrir</b>. Aún en las circunstancias más críticas que podamos imaginar, la soledad y aislamiento absolutos no existen. Y estas condiciones tan críticas solo ocurren de manera muy excepcional en la vida de muy pocos seres humanos.</div>
<div style="text-align: justify;">
Segundo, la única manera de contemplar nuestro interior, adentrarnos en nuestra mente y comprendernos como seres pensantes es el aislamiento. Un aislamiento que incluye, según muchos maestros de la meditación han explicado, una indispensable desconexión sensorial. Tal desconexión podría angustiar a muchos, ya que la contaminación visual y auditiva nos avasalla minuto a minuto y hemos no solo llegado a tolerar este tumulto de estímulos sino que se ha vuelto una adictiva necesidad. Así, <b>si queremos saber quienes somos, deberemos ver hacia adentro y hacerlo en paz, silencio y, por supuesto, aislados</b>. Aislados y no necesariamente solos, pues hay personas que pueden sentirse agobiados por la soledad rodeados de multitudes y hay otras que, físicamente apartadas de otras personas, se sienten sin embargo en paz, comunión y armonía con toda la humanidad.</div>
<div style="text-align: justify;">
Si se desconecta el ruido de fondo y frenamos el ímpetu de nuestros actos, aún el libre fluir de la imaginación podremos ver, bajo la luz propia que todos podemos emitir, la verdadera naturaleza de las cosas. Entonces llegamos a una conclusión fundamental que parece obvia pero a casi siempre, al darla por sentada, pasamos por alto: <b>"Soy un ser humano. Quiero ser parte de esta especie. Quiero ser feliz"</b>. Lo trágico de todo esto es que vivimos deseando felicidad para los demás y rogamos por ella para nosotros... Como si la felicidad fuese un don que cae de lo alto, como un regalo, como un maná vital. El milagro ya está hecho: podemos ser felices si queremos y si nos ejercitamos para ello. Felices aún en medio de la adversidad, del sufrimiento cotidiano, aún sabiendo que la muerte levantará cosecha una y otra vez y no quedará ninguno de nosotros a salvo. Ser feliz es un acto de fe pero a la vez una toma de posición, una posición existencial firme basada en la compasión (no lástima sino identificación plena), la paciencia, la tolerancia y el amor. A esto nuestros profetas le llamaban "Sabiduría". No es un anuncio que se hace al mundo: No se dice "soy feliz", por decreto. Se vive feliz haciendo cosas felices, sirviendo al que necesita, asistiendo al ser humano en conflicto, aceptando las penas que nunca son ajenas porque de alguna manera también podrán ser nuestras algún día... Esto es el verdadero amor, que leva a la paz, Nirvana, Iluminación, Estado de Gracia, como quieran llamarle.</div>
<div style="text-align: justify;">
No hablo de religiosodad, sino de espiritualidad. Yo he encontrado mis respuestas en Jesús de Nazaret, y eso que soy un fanático de las ciencias psiquiátricas, en especial del análisis transaccional. Otros siguen buscando, o han encontrado en otros grandes espíritus, sus propias respuestas. Solo pido que antes de hacer el próximo movimiento en nuestras vidas pensemos: ¿Estoy siendo honesto? ¿Tengo buenas intenciones? ¿Lo que voy a hacer será constructivo para el mundo? No queremos llegar a la parálisis absoluta: mientras más y más ejercitemos el alma en pensar positivo, menos mecánico será el proceso y mayor gozo habrá en nuestras vidas.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Con gran afecto para los que me leen</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Hugo Vilarroel Ábrego.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<br />HUGO VILLARROEL ABREGOhttp://www.blogger.com/profile/17961999961329849351noreply@blogger.com3