martes, 21 de abril de 2009





"La última vuelta de tuerca": un poco de historia.

Para empezar, quiero agradecer a las personas que me han hecho llegar sus comentarios sobre mi segunda novela. Cada una de ellas tiene una visión particular, muy propia e irrepetible, pero he notado que hay una convergencia notable de ideas hacia ciertos elementos temáticos y estilísticos del libro:

1. Su estructura, que parece evocar un guión cinematográfico;
2. La facilidad con que la historia se deja leer, generando cierta avidez por leerla de un tirón;
3. La capacidad del texto para despertar emociones muy intensas y variadas.
Esto me lleva a hacer alguna gimnasia mental y, despupes de un par de semanas de cavilación, he llegado a algunas conclusiones:

1. Sí, no se puede negar que antes de escribir el libro lo veía en secuencias de imágenes, como si se tratase de las escenas de una película.
2. En contraposición a "En el nombre de David", mi primera novela, el desarrollo lineal del tiempo ha facilitado la lectura, aunque me preocupa que esto lleve, en el futuro, a un estilo de escribir más parecido al de los bestsellers que al de los literatos que siempre he admirado. No puedo, sin embargo, quejarme. El barroquismo de primer libro fue más un ejercicio de autocomplacencia que un intento de comunicación con los lectores.
3. Mi mayor satisfacción, lo confieso, se basa en la capacidad de la novela en despertar emociones. Creo que esto ha sido posible por dos razones. En primer lugar, la prosa poética puede seducir al niño interior del lector, en especial si se adorna con elementos épicos, no importando lo modesto del escenario o lo simple o complejo de la acción. Segundo, los personajes son muy emotivos per se, soportan una pesada carga afectiva que los desborda, al parecer, y tomando en cuenta las opiniones recibidas, contagiando al lector.

Esperaré otras opiniones y puntos de vista antes de seguir arribando a conclusiones. En mí hay, además del escritor en crecimiento, un hombre de ciencia que necesita de evidencia, que trata de colectar y sistematizar toda la información posible antes de validar la hipótesis que considero fundamental: Creo que vale la pena seguir escribiendo.

En subsecuentes entradas del blog comenzaré a narrar el proceso creativo que llevó a la publicación de esta novela.


Hugo Villarroel Ábrego.