lunes, 29 de marzo de 2010

SOBRE UNA CANCIÓN QUE HA CAMBIADO MI VIDA.

"Hoffnung". Una palabra que no significa nada para un hispanoparlante. Reggae en alemán... haría juego perfecto con un torero noruego. Jan Delay es un artista poco conocido fuera del centro de Europa, pero que está levantando oleadas de críticas positivas. Las madrugadas insomnes en el Hotel Hilton de Praga se sobrellevaban mejor con música de fondo y, para mi alegría, la selección de música de MTV Deutschland era excelente.
Luego suena el reggae, "Hoffnung". Y con las notas nace también la magia. No soy seguidor de Marley y las cadencias chiclosas de ese ritmo nunca han sido de mi preferencia. Pero la voz nasal de Delay empieza a sonar y vale la pena abrir los ojos, incorporarse de la cama y ver el video clip, aún con los ojos encandilados por la luz de la pantalla. Asombrado, veo un pasaje invernal post-armagedónico y a un barbudo sobreviviente vagando con su perro... Quedé preso desde ese instante no solo del cremoso blanco y negro de esa obra de arte fílmica, sino de la maravillosa ejecución y ternura de la canción. El mensaje es simple... el mundo puede ser hostil, frío y solitario, pero la música rescata al hombre y a su alma. "La música es bella" canta Delay, y nos recuerda que siempre hay esperanza, que el esplendor de la creación humana universal, la música, nos nutre, nos da color (literalmente, el blanco y negro del video pasa a full color) y genera paz y alegría aún en la peor de las adversidades. La canción termina con una memorable sección de instrumentos de viento y coros, con un tono casi épico...

Si alguien quiere ver esta obra maestra y oír la canción, búsquen en YouTube "Hoffnung", por Jan Delay.


Otra postalita de Praga, para los amigos...